Las sanjuaninas Cecilia Román (15-4-1) y Leonela Yúdica (16-0-3-1, 1KO) consiguieron el objetivo de terminar el viernes como las monarcas de los títulos gallo y mosca de la Federación Internacional de Boxeo, respectivamente. Lo hicieron de diferentes maneras. Es que la primera pudo sacarse la espina de vencer por puntos por primera vez a la jujeña Julieta Cardozo (12-4-0, 1KO), en el tercer enfrentamiento profesional de ambas para de esta manera darle forma exitosa a su quinta defensa de la corona ecuménica. Mientras que Yúdica estuvo mucho menos sobre el ring ya que en el cuarto round y tras un cabezazo involuntario con la mexicana Maria Millán (25-5-1-1, 9KO), la pelea fue declarada sin decisión ya que el corte en una arteria del cuero cabelludo de la local provocó que el combate no pudiera seguir. La sangre que salía de esa zona fue una de las postales de la megavelada en el Aldo Cantoni que tuvo a cinco mil sanjuaninos alentando a sus dos campeonas reinantes.
CLARO
Román esperó esta pelea de manera especial ya que Cardozo la había superado en dos ocasiones durante su trayectoria profesional. Aunque el panorama ahora es bien distinto con Román siendo la campeona de la FIB y transitando claramente su mejor momento profesional. Como hace desde un par de años, su preparación fue en Buenos Aires junto a su entrenador Juan Ledesma. Su físico demostró una vez más que sigue en progreso y a nivel boxístico tuvo un desempeño interesante. Sus mejores combinaciones en la primera parte del combate le permitieron ir sacando diferencias en las tarjetas que la vieron ganadora de manera unánime (99-91, 98-92 y 97-93). Cecilia privilegió el trabajo en la distancia ante Cardozo, que nunca se pudo meter en la corta distancia donde apelaba a los golpes al cuerpo. Con buenos momentos de traslación, dejó en evidencia que la jujeña era incapaz de acortar las distancias. Pegó más y mejor siempre la sanjuanina, y en la segunda parte del combate se dedicó a manejarla aún más a la distancia. Román tenía claro que a esa altura no tenía sentido una pelea cuerpo a cuerpo porque era exponerse a un golpe que pudiera cambiar la historia en su contra. En su quinta defensa, la sanjuanina ratificó que su crecimiento boxístico continúa tanto o más como el buen rendimiento desde lo físico. El saldo de la velada de anoche sin dudas es más que positivo, sobre todo desde lo anímico sabiendo que pudo vengarse de una de las boxeadores que la habían derrotado.
Román y Yúdica apuntarán a realizar una nueva pelea defendiendo el título este año.
AGRIDULCE
A diferencia de las otras veces que compartió velada con Román, esta vez Yúdica fue planificada previamente en su combate. Millán, una boxeadora con buen récord y varios nocaut en su haber, aparecía como una adversaria para respetar. Yúdica, en ese sentido, siempre tuvo clara su intención de pelea sabiendo que debía entrar y salir contra la azteca, que siempre apuntó a tenerla cuerpo a cuerpo. Con sus combinaciones en el segundo y tercer asalto pudo abrir la guarda de la adversaria. En una pelea de trámite parejo y con pronóstico reservado, todo se precipitó en el cuarto asalto. En un cruce a fondo entre las dos, la sanjuanina tuvo la mala suerte de sufrir un corte en el cuero cabelludo justo en una arteria. Por eso la potencia con que la sangre le salía y eso resultó clave al momento que el médico decidiera no dejarla seguir peleando. Al ser el cuarto round, en el curriculum de cada una se debió cargar una pelea "sin decisión". Una auténtica lástima porque en los primeros asaltos se vio un duelo más que interesante de estilos y con el público muy prendido con su aliento para la anfitriona.
Debido al corte, Yúdica fue trasladada a una clínica para hacerle las curaciones de rigor y su rival fue atendida en el propio Cantoni por los médicos por la inflamación en su ojo izquierdo.
Román y Yúdica continúan con sus reinados. En el futuro se verá si finalmente deciden apostar por una defensa lejos de su San Juan o continúan siendo locales ante adversarias que por ahora no consiguen llevarse sus coronas.