A pleno. Claudia Carrizo y Luciana Martín (foto), en la muestra de destrezas en valla junto a los perros que entrenan en la Policía.

 

Un mes y nueve días son los que llevan Claudia Carrizo y Luciana Martín en la División Canes y Montada de la Policía de San Juan, que ayer cumplió su sexto aniversario. Las agentes son las primeras mujeres en integrar esta división y protagonizan un proyecto piloto que sienta sus precedentes para que próximamente puedan incorporarse más mujeres a este área. Así lo confirmó ayer Sergio Ávila, subcomisario a cargo de la división, en la celebración aniversario. "Me lo han hecho saber el jefe y el subjefe de Policía, porque ellas integraron un proyecto piloto y por su desempeño han superado las expectativas, siempre es bueno contar con más personal", dijo Ávila.

La dupla ya había tomado trascendencia hacia fines de diciembre por el caso de Florencia Olivares, una joven de 20 años que desapareció de su casa en el Barrio La Calandria en Chimbas y que resultó el debut de las agentes junto a Apolo, un bloodhound preparado para búsqueda, el que con su olfato resultó determinante en el hallazgo de la joven, en la casa de un amigo.

El día a día de estas chicas se concreta junto a Keila y Figo, dos ovejeros alemanes de siete años de edad a quienes entrenan para tareas de seguridad y exhibición. Esto significa que además de entretener con sus piruetas a niños y adultos en los eventos que los convoquen, los perros son preparados para brindar seguridad en canchas o eventos de gran magnitud.

"El perro junto al efectivo policial actúa como un disuasivo que genera respeto y forma parte de lo que aprenden en base a adiestramiento y disciplina", explicó Luciana Martín.

El entrenamiento se concreta de lunes a viernes, mañana y tarde, de 8 a 12 horas y de 18 a 20. "Se trabaja con rutinas de periodos cortos de 15 a 20 minutos, que se van reiterando y luego se les da un descanso de una hora, en la tarde se reitera lo mismo porque la clave es la constancia", detalló Claudia Carrizo. La tarea también incluye el mantenimiento, sanidad y alimentación del perro, así como la limpieza de los caniles.

Un apartado en sí mismo es el vínculo que genera con los animales, lazo que llevó a que estas chicas definan su trabajo como "lo mejor que les pudo pasar". Ambas destacaron la fidelidad, el compañerismo y la alegría con las que son recibidas día a día. La División Canes y Montada consta de 30 efectivos y 37 canes, y 20 policías, 19 equinos y una mula. Actualmente sus actividades están afectadas al Operativo Verano, en la zona del Pinar, la parte del río que se encuentra en las inmediaciones y también la zona de kayak, con la presencia de la policía montada. En el caso de los perros, se han afectado efectivos al control del Parque de Mayo.

 

  • Gran exhibición de destrezas de festejo

 

Momento cúlmine. El cierre del encuentro aniversario fue con una pirámide humana por parte de la Montada y gente de canes.

La División Canes y Montada cumplió ayer seis años y es así que perros y caballos mostraron sus capacidades en una exhibición especial. Keila, Figo, Negro, Ashlan y Muska fueron los perritos encargados de hacer la apertura de la muestra con sus habilidades. Esto incluyó ejercicios de desplazamiento y conjunto de destrezas de vallas y trucos, como subirse a la espalda del efectivo policial. Muska, una golden retriever adiestrada para la búsqueda de personas con vida entre escombros, hizo una demostración buscando al policía oculto entre unos tachos.

Por el lado de los caballos, la gente de la Montada mostró sus destrezas con los equinos, amansamiento y confianza con el jinete. Al cierre y como broche de oro, el personal formó una pirámide humana arriba de los caballos. En la jornada de ayer participaron Luis Martínez, jefe de Policía; Néstor Alvarez, subjefe de Policía; el subsecretario de Seguridad, Abel Hernández, y el subcomisario Sergio Ávila, de la División Canes y Montada, además de personal policial y retirados que recibieron distinciones.