"Pude salirme del lugar de protagonista y he podido reflexionar sobre los paradigmas y nuevos discursos que esta obra sigue generando hasta hoy" dijo Mariana Esquivel, pintora y dibujante sanjuanina, autora del cuadro que estuvo en el centro de una polémica que le costó un primer premio de arte y la puso en los titulares de todo el país. Fue ayer, durante la inauguración de la muestra "Otra mirada de mujer" que organizó la galería Artify en el espacio Hub del oeste (Sarmiento 582 sur), donde fue invitada para conversar de la nueva perspectiva tras el "escándalo" que para Esquivel y algunos de los presentes, marca un hito en cuanto a derechos de autor en el arte.
"Agradezco lo que pasó, porque esta obra es una bisagra del arte local y nacional" dijo a DIARIO DE CUYO la artista después de presentar la publicación "Memorias del barro, apropiación, plagio y linchamiento en el debate público", un breve ensayo que hizo en base a las capturas de redes sociales y de las noticias que hablaron del escrache por plagio que le hizo la fotógrafa Nora Lezano después de que Esquivel ganara el primer premio de un concurso de pintura del Museo Franklin Rawson con el cuadro que realizó recreando la foto de la banda Mi amigo invisible, de la que es fan. "El hecho de partir de una fotografía y llevar esa imagen con pincel a un lienzo, ya es una obra nueva" fundamentó la joven
"Ella (Lezano) me llamó para pedirme perdón, me dijo que le habían hecho el texto y todo se le fue de las manos. Cuando supe que la foto era de ella sí la contacté, nunca me respondió" se defendió ahora Esquivel.