"Sólo una vez estuve con ella y estoy arrepentido, nunca quise hacerle daño a nadie… pido una oportunidad, tengo seis hijos, tres del corazón". En sus últimas palabras antes de finalizar el juicio, el carpintero de 36 años acusado de enamorar y abusar a una vecina suya de 12 años aprovechándose de su cercanía (era amigo del padre) y la inmadurez de la menor, buscó algo de indulgencia. Pero el juez Miguel Dávila Safe (Sala I, Cámara Penal) entendió, igual que la fiscal Marcela Torres, que debía recibir un duro castigo porque a causa de ese delito, la niña sufrió un grave daño en su salud mental, pues quedó embarazada y tuvo que ser ser sometida a un aborto legal con 13 semanas de gestación para preservar su vida. Por eso el juez le aplicó la misma pena solicitada por Fiscalía, 18 años de cárcel, con una diferencia: no consideró acreditada la corrupción sexual de esa niña como argumentó la fiscal, dijeron fuentes judiciales. El magistrado también accedió al pedido de la Asesora de la Niñez Patricia Sirera, y ordenó la intervención del Ministerio de Desarrollo Humano para que asista a esa menor a nivel material y también psicológico.
Todo se descubrió el 2 de octubre de 2019. Ese día, en el hospital de Angaco, le informaron a los padres de la nena que los dos desmayos que había sufrido en los últimos días se debían a un embarazo de 13 semanas de gestación. La novedad cayó como una bomba. Entonces se denunció el caso y los papás aceptaron que la nena sea sometida a un aborto legal, pues los médicos evaluaron que de persistir con el embarazo se ponía en riesgo su vida.
En los alegatos, la defensa había pedido el mínimo de la pena sólo por el delito de violación, 6 años, porque no consideró acreditado el agravante del grave daño en la salud mental ni física de la niña. Y también cuestionó el procedimiento que lo hizo dudar de la cadena de custodia del material genético que sirvió para hacer la prueba de ADN, un estudio que arrojó el 99,99% en el índice de probabilidad de paternidad del carpintero. Ahora, podrá reclamar ante la Corte de Justicia.
- Condenado a 16 años por violar a una vecina
Los jueces Federico Rodríguez, Gema Guerrero y Andrés Abelín condenaron ayer a un sujeto identificado como D.L. a 16 años de cárcel por violar a una vecina desde que ella tenía 14 años hasta casi los 16. El castigo fue por el delito de abuso sexual con acceso carnal agravado porque produjo un grave daño en la salud mental de la víctima y porque en una oportunidad utilizó un arma de fuego.