Cuando la cosecha de uvas en San Juan está casi finalizada y apenas quedan unos pocos kilos en los parrales, las liquidaciones a los productores vienen demoradas y la razón, según dicen en el sector, es que no quieren cerrar los tratos a la espera de que mejore el precio de las uvas. La pretensión entre los viñateros es que les paguen un piso de $40 por las comunes, $50 por las blancas y $70 por las tintas. Pero el sector industrial ahora les ofrece entre $32 y $34 por las comunes, entre $35 y $40 por las blancas y no más de $60 por las tintas.
"Los productores no estamos dispuestos a aceptar los precios tan bajos que el sector industrial nos quiere pagar", expresó Pablo Martín, uno de los referentes de la Mesa Vitícola. De acuerdo a lo que se habla en el sector, el primer pago de las operaciones se haría en mayo y se cancelaría en 6 cuotas.
Los productores explican que han tenido una suba importante en los costos, por ejemplo de los fertilizantes y en dólares y la situación continuará este año.
Desde la Asociación de Viñateros Independientes, Juan José Ramos dijo que "habíamos pedido la intervención del Estado, pero hasta ahora no ha dado resultado . Por eso les pedimos a los productores que todavía no hagan las liquidaciones para ver si mejoran los precios".
El problema es que el viñatero, mientras más se demore en acordar con el bodeguero, comenzará a recibir los pagos más tarde. Y todos tienen urgencias por cancelar los compromisos asumidos, por ejemplo gastos de la cosecha y preparar los parrales para un nuevo año productivo.
Desde la Cámara de Bodegueros de San Juan guardaron silencio sobre la política de precios, al menos hasta ahora.
Eduardo Garcés, de la Federación de Viñateros, sostuvo que "no nos cierran los precios que nos han ofrecido y encima este año hay menos uva y con heladas históricas en Europa, que repercutirán en la cantidad de vinos en el mercado". El productor hizo referencia a una ola de frío que está afectando a zonas productivas con viñedos en España y Francia. En este último país se registraron las temperaturas más bajas al menos desde 1947 hasta ahora.
José "Catuco" Molina, de la Cámara de Productores Vitícolas, explicó que "con la inflación que hay y los problemas de productividad, la uva debería valer mucho más. El panorama es preocupante porque estamos pasando por una encrucijada fuerte en cuando a la sostenibilidad de los productores".
Este panorama se da cuando ya se están conociendo los últimos números de la cosecha 2022 (ver infografía). Por ejemplo, según los datos del INV, en San Juan se llevan cosechados poco más de 426 millones de kilos de uva, cuando la estimación del organismo había indicado que se iban a recolectar unos 480 millones de kilos, un 10% por debajo de la vendimia pasada, cuando a las bodegas fueron a parar 530 millones de kilos. Entre las causas del fenómeno se encuentran las heladas, los vientos de la temporada y por supuesto la sequía, que amenaza con continuar para la nueva vendimia.