
Están ligados al ciclismo desde siempre. No saben por qué, pero desde que eran novios Natalia Espina y Walter Aballay iban a las carreras. Luego se casaron y su hijo Nelson comenzó a correr y a pesar que con los años dejó de practicar, el matrimonio junto a Nelson y Mili, su otra hija, viajan todos los fines de semana llevando agua a todos los competidores. "Al Chino Saldaño, al Pica Jacamo y al Bebé Agüero sabía llevarles ensalada de fruta. No nos imaginamos estar lejos de este deporte", contó Natalia.
