Uno de los efectos de la crisis hídrica, que apunta a ser una de las más prolongadas de la historia provincial, es que la generación hidroeléctrica de los tres diques, Los Caracoles, Punta Negra y Quebrada de Ullum, es 39% menor a diciembre del año pasado. Es que mientras en ese mes se llegaron a generar 140 MW en total, ahora cayó a 85,46 MW. Pero, como si fuera poco, el primero de los embalses dejará de turbinar el 26 de diciembre, según las cuentas que sacan en Energía Provincial Sociedad del Estado (EPSE), por la falta de agua.

Carlos Larisson, director secretario del organismo, dijo que por estos días el esfuerzo está centrado en mantener la mayor cantidad de agua posible en el Dique de Ullum, por el componente turístico, pero que todo indica que el panorama se irá agravando. Los Caracoles dejará de generar el 26 de diciembre y si no cambia la situación, en Punta Negra pasará lo mismo a partir de junio y la única fuente de electricidad será Quebrada de Ullum. En el caso de Los Caracoles, la última vez que dejó de generar por un período prolongado fue desde noviembre del 2014 a enero del 2016.

El funcionario dijo que la situación del embalse que dejará de generar en diciembre estaba prevista. En la actualidad, Los Caracoles está generando 45 MW, Punta Negra 24 MW y Ullum 16,46 MW, que suman los 85,46 MW que entregan en la actualidad los tres espejos de agua. La situación de los diques no es una sorpresa porque cuando en octubre el Departamento de Hidráulica dio a conocer el pronóstico hídrico de derrame del río San Juan para la próxima temporada, los números indicaron que el volumen que traerá el río alcanzará a los 659 hm3, un 38% menos que el ciclo actual, que llegó a los 1.060 hm3. Fue un dato preocupante porque ya en ese momento se anticipó que de continuar la situación de falta de agua podría afectar en un futuro, para el período 2020/2021, la generación de los diques al tener que recurrir al desembalse para asegurar el consumo humano, el riego y las actividades recreativas. En la práctica ese problema llegará antes porque ya el 26 de diciembre Los Caracoles dejará de generar.

Larisson aclaró que la decisión de preservar Ullum es del Gobierno provincial, teniendo en cuenta que, además de la provisión de agua para el consumo humano, es centro de recreación y esparcimiento en el verano por los deportes náuticos que allí se practican.

La situación de sequía que se vive en la provincia no es nueva, pero es una de las más pronunciadas. Es que Hidráulica comenzó a medir la precipitación nívea y el derrame en los ríos en el año 1909, es decir, hace exactamente 110 años. En ese lapso, los ciclos más pobres fueron en el periodo 1968/69, en que se produjo la gran sequía y vino un escurrimiento en el río San Juan de 614 hm3. En aquel entonces no existía ningún dique en la provincia. Otro período seco fue en 1970/71 cuando el derrame fue de 644 hm3 y se hizo la construcción de la batería de perforaciones de agua de Zonda. Luego, en el ciclo 2014/2015 el río trajo 714 hm3, en momentos donde atemperó la situación la reserva del Dique de Ullum, porque aún no estaban Los Caracoles y Punta Negra. Ahora, con 3 diques embalsando agua y un cuarto en construcción, El Tambolar, el pronóstico indica que el río traerá apenas 659 hm3, entre los más bajos desde que el organismo provincial realiza las mediciones.

Un dato a tener en cuenta es que mientras el año pasado para esta época la generación llegó a los 140 MW, y este año apenas se alcanza los 85,46 MW, se está cada más lejos de los 170 MW, que es la ideal en condiciones óptimas de derrame del río San Juan.

La preocupación es que si en el próximo invierno no hay nevadas suficientes, el panorama se va a complicar porque va a encontrar a los diques con su nivel cada vez más bajo e imposibilitados de seguir generando energía, que se vende al Mercado Eléctrico Mayorista (MEM) y que significa ingresos para la provincia.