Fue el debut ideal para los Jaguares en el Super Rugby, que en Sudáfrica superaron a los Kings por 39-26 con una buena producción del equipo argentino que marcó tres tries (sumó punto bonus), tuvo una efectividad inmejorable a los palos (anotó los nueve que tuvo), pese a que tuvo un arranque y un final con algunos desconciertos. minutos iniciales con algunos desconciertos.
Al igual que el año pasado, en su primera experiencia en este torneo, los Jaguares ganaron en el debut, aunque esa vez fue contra Cheetahs. Tras lo que fue su final de campeonato, con varias derrotas y algunos rendimientos flojos, lograron mejorar su imagen este sábado ante Kings.
En el arranque del partido algunos errores no forzados del equipo argentino llevaron a los Kings, un equipo de menor jerarquía en Sudáfrica, a adelantarse en el marcador con algunos penales.
Una vez que se acomodó en el terreno y se hizo dueño del partido, Jaguares no sufrió más problemas. Abrió el in-goal rival con un gran try de Gonzalo Bertranou, el número nueve encargado de reemplazar al lesionado Martín Landajo. Fue 19-12 en el primer tiempo, con aciertos a los palos de Díaz Bonilla y González Iglesias.
En el segundo tiempo Jaguares logró rápidamente alejarse en el resultado y en pocos minutos marcó dos tries que rompieron el partido. Primero Senatore, quien corrió sólo casi toda la cancha, y luego Tuculet.
Con el punto bonus asegurado por marcar tres tries y un recambio completo en el terreno para cuidar a los jugadores pensando en el partido de la próxima semana, ante Stormers, en Ciudad del Cabo. Allí empezó la desconcentración del equipo argentino. Llegó el descuento de Kings, con un try de Mapimpi. El partido estaba controlado, pero llegó la amarilla a Felipe Ezcurra, a siete del final, y luego a Matías Moroni, en la última del partido. Con dos menos y algunos errores defensivos, llegó el descuento final de Vulindlu.
La próxima semana los Jaguares se medirán ante Stormers, en Ciudad del Cabo, en la segunda fecha del Super Rugby. Luego les tocará disputar tres encuentros como local.
Fuente: La Nación