POR LA FE. Este año, más de 3.000 chicos de participaron de la Peregrinación de Jóvenes a Ceferino Namuncurá. La imagen del Beato los acompañó.

 

Bajo el lema ‘Prendete en el camino’, ayer se realizó una nueva edición de la Peregrinación de Jóvenes al Complejo Turístico Religioso Ceferino Namuncurá, en San Martín, con una particularidad. Los chicos, esta vez, se arrodillaron para pedir una bendición por los que más sufre. Fue durante la previa que se vivió en el atrio de la Catedral y que contó con la presencia de monseñor, Jorge Lozano. Más de 3.000 peregrinos participaron de esta demostración de fe.

Desde las 8, los jóvenes comenzaron a concentrarse frente a la Catedral dispuestos a mostrar la alegría de participar de la caminata. Es por eso que en los primeros minutos de la previa hicieron coreografías, cantaron y saltaron, arengando a la comunidad religiosa que representaba. Pero después llegó un momento en que todos volvieron a unirse, pero esta vez en silencio.

En esta edición, la peregrinación de jóvenes contó con la presencia de las reliquias de los beatos Ceferino Namuncurá y Carlo Acutis.

Monseñor Lozano salió del templo portando la imagen del Santísimo que colocó en un pequeño altar para vivir un momento de adoración. Y en este marco, los jóvenes se arrodillaron pidiendo por diferentes intenciones, entre ellas, que Dios bendijera a los que más sufren, aquellos que están enfermos, que los afecta la pobreza o que perdieron un ser querido.

Este momento especial duró unos 10 minutos porque combinó rezos y canciones de alabanza. Durante todo este tiempo, los chicos permanecieron de rodillas sobre el pavimento.

Tras ese pequeño sacrificio, volvió la algarabías. Los diferentes grupos comenzaron a agitar las pancartas que llevaron y a bailar con alegría en los minutos previos de iniciar la peregrinación.

Los jóvenes partieron hasta Ceferino Namuncurá con varias recomendaciones por parte de los miembros de la Pastoral de la Juventud, organizadora de este evento. Les recomendaron caminar tranquilos, ya que no se trataba de una competencia, y cuidar al ‘hermano’ que llevaban al lado.

Al mediodía, los peregrinos llegaron hasta el Camping Municipal de San Martín donde no sólo compartieron el almuerzo. Este año participaron en juegos y pudieron disfrutar de la música en vivo con un Dj antes de partir hasta Ceferino Namuncurá donde se celebró la misa.

 

Por amor a los animales

Marcos Díaz y Andrea Álvarez participaron de la peregrinación junto a ‘Mara’, la perra que ‘aman como a una hija’. El objetivo fue fomentar el amor y respeto por los animales como también la tenencia responsable de mascotas.

 

Con Ceferino de compañía

Los chicos del grupo Scouts San Damián, de la villa homónima de Rawson, realizaron toda la peregrinación portando una imagen del beato Ceferino Namuncurá. Hicieron relevos para descansar de tanto en tanto.

 

Un momento de adoración

Este año, en la previa, los jóvenes pudieron compartir un momento de Adoración Eucarística ante la imagen del Santísimo y con la presencia de monseñor Lozano. Pidieron por los enfermos y también por los carenciados.

 

Con colores de los santos

Alumnos de 1er a 6to años y profesores del Colegio Fray Mamerto Squiú peregrinaron luciendo capas de diferentes colores que simbolizaron el hábito franciscano. Además, cada uno de los colores representó un santo diferente.