En los zapatos del productor y mánager Edgardo Díaz, el creador del conjunto infantil Menudo, Yamil Ureña encarna el rol central de Súbete a mi moto, la biopic de una exitosa plataforma de servicios como es Amazon Prime Video. El gran momento que atraviesa en su carrera gracias a la vuelta al tapete del grupo que fue un boom en su momento -por el cual transitaron en su infancia Ricky Martin y Robi Draco Rosa-, su trampolín a la fama, la experiencia de ponerse en la piel del famoso empresario que despertó polémica respecto a las versiones de explotación y abuso infantil; y también el anhelo de que la comunidad latina tenga su lugar; son algunos de los temas que el artista de la tira, radicado en Los Ángeles hace 10 años, dialogó con DIARIO DE CUYO.

-¿Cómo llega a tus manos el libreto de Súbete a mi moto?
-Fue como un casting en Puerto Rico, me enviaron las escenas para hacer un protagónico complejo en una tira de 15 capítulos y me dijeron: "es para ya", al final del día, me dijeron que era mío y que me regresara a Los Ángeles, que iba a ser el protagonista y en Amazon. El proceso fue bastante movido, antes de irme, traté de recoger información de Menudo, y desde el momento que recibí los libretos, tuve dos semanas para prepararme.

– ¿De qué manera te preparaste?
– Uno como actor no puede esperar a que llegue la oportunidad, es un trabajo constante. Estuve una década preparándome para este personaje. Cuando llegó este papel a mis manos no hubo espacio para cuestionarme o dudar, tenía que actuar y fluir.

– ¿Cómo fue la construcción?
– Yo interpreto tres épocas ’70, ’80 y ’90, y hay una época actual que la hace Braulio Castillo. Como todo fue tan rápido, no tenían pautado que me reuniera con él, pero yo necesitaba hacerlo porque íbamos a hacer al mismo personaje y la producción siempre fue muy accesible.

– ¿También te reuniste con el verdadero Edgardo Díaz?
– Yo coincidí con él profesionalmente en la competencia de canto Objetivo Fama, en Univisión, en 2008, donde él estuvo como juez invitado. Para interpretarlo, me valí de mis herramientas y de unas cintas con una entrevista de más de 7 horas que repasé tres veces. Busqué un personaje real y vulnerable. La gente quiere controversia, pero como actor tenía que crear un ser humano, además de la frustración y la rabia que experimentaba dentro de la industria, razones por las que, desafortunadamente, los Menudo pagaban los platos rotos.

– Sobre Edgardo pesan graves rumores vinculados al abuso laboral infantil, entre otras cosas.
 – Es una persona decidida, segura de sí misma, que no es de pedir disculpas. Edgardo marcó una época en la industria. La situación es que el negocio era con niños, algo muy delicado. Por la serie pasaron 36 niños, la cifra de chicos que pasaron por Menudo en la vida real. En nuestro caso, los niños vivieron una experiencia cuidada viviendo apenas un poquito de Menudo. Hemos evolucionado como industria y personas. Hay momentos fuertes y ciertas cosas que el personaje transmite, temas que no se tratan pero se deslizan.

  "Cuando llegó este papel a mis manos no hubo espacio para cuestionarme o dudar"

-¿Ejemplos?
– Como el manejo con los niños, cómo los trataba por ejemplo. Eso me valió que, al terminar la escena 13, alguien del set me empezara a insultar creyendo que yo era Edgardo. Sin duda va a marcar mi carrera.

 

– ¿Cómo fueron tus inicios en la industria?
– Mis comienzos fueron de extra buscando la próxima oportunidad y cuando me mudé a Los Ángeles apuntando a Hollywood tuve que aprender a sobrevivir, hice un examen y como era bilingüe fui el primer empleado que contrataron en la oficina de censos de Hollywood.

 -¿Cuándo nace tu interés por la actuación?
– Yo me mudé a Nueva York a estudiar actuación. En mi familia nadie tiene la vena artista y yo siempre decía que quería ser doctor. Entonces, cuando decidí no serlo, pensé en lo más loco y dije: actor. En un periódico leí un anuncio y empecé con clases lo sábados por un año sin decir nada a nadie, quería saber si era lo que me interesaba sin recibir influencia externa. Hay mucha incertidumbre en esta carrera, pero empecé producción en Nueva York, como el único latino entre 45 estudiantes de todo el mundo. Desde muy temprano tuve la percepción de que sí somos minorías.

 "Edgardo marcó una época en la industria. La situación es que el negocio era con niños’

– Una situación por la que luchan muchos artistas desde su lugar.
– Siempre he tratado de sacar el punto de vista positivo, de aprendizaje con sacrificio y perseverancia, yo estudiaba y trabajaba en lo que en español sería tiendas por departamentos, batallando para sobrevivir. Cuando comencé a estudiar, jamás me hubiese imaginado que llegaría esta oportunidad en una plataforma como Amazon Video. Me decían: "Eres bueno pero no se te va a dar porque el mercado no está para ustedes los latinos’. Y, hoy en día, en la representación de nuestra comunidad hay mucho por hacer, pero ya a través de Amazon hemos podido contar esta historia, algo que es muy importante. Los latinos somos capaces, existe el talento, se necesitan las oportunidades y el compromiso de la audiencia que apoye las producciones, que consuman los proyectos, como en este caso.

-¿Cómo es la repercusión en las redes?
-Me celebran, ya quieren un próximo proyecto.

 
-¿Se viene la segunda de Súbete a mi moto?
– Esa es una pregunta para Amazon Prime.
 

Algunas imágenes. Súbete a mi moto, la historia detrás del furor de Menudo y su mánager, Edgardo Díaz.

  ((CREDITO FOTO GENTILEZA: Siul Martinez y Paul Anthony Garcia)