El anuncio del ministro Sergio Massa del denominado dólar agro, un tipo de cambio diferencial que beneficiará en particular a la oferta exportable de la vitivinicultura, cayó bien entre los productores locales, aunque la observación que hacen es que el período de vigencia será muy breve. Es porque empezará a regir a partir del sábado 8 de abril y tendrá una duración de unos 5 meses, hasta el 30 de agosto, como fecha de vencimiento inicial. Aunque la expectativa es que la medida se prolongue por más tiempo.

La medida apunta a que los productores accedan a un tipo de cambio diferencial de $300 con el fin de engrosar las reservas del Banco Central. Tras la floja liquidación de divisas en el primer trimestre, con este programa en el Gobierno nacional apuntan a que ingresen unos U$S 9.000 millones.

Según indicó Massa en el anuncio del mediodía de ayer, las medidas apuntan a "fortalecer al modelo agroexportador argentino y fortalecer nuestras reservas y nuestra moneda, tan importante en momentos de incertidumbre y volatilidad a nivel global y local".

Este tipo de cambio diferencial beneficiará a todos los productos de la vitivinicultura que se exporten a partir del 8 de abril: vino fraccionado y granel, jugo concentrado de uva, pasas y uva en fresco.

Para otros sectores, como el de la soja, el llamado Programa de Incremento Exportador regirá desde el próximo 10 de abril al 31 de mayo.

Una condición que deberán cumplir las empresas exportadoras para poder acceder al flamante dólar agro de $300 es adherir con sus productos dentro del programa Precios Justos y "aquellas que participan, respetarlo", según dijo el ministro.

Desde la Coviar, su presidente, Mario González, destacó como positiva la medida porque "mejora las condiciones que tienen las empresas vitivinícolas para poder exportar y sostener mercados internacionales", al tiempo que celebró la posibilidad de dar respuesta por parte del Gobierno nacional a un sostenido pedido del sector para atender la pérdida de competitividad de la vitivinicultura argentina.

Juan José Ramos, integrante de la Confederación General Pyme, expresó que "era un reclamo que veníamos impulsando desde la entidad", aunque reclamó que podría tener vigencia por un período mayor.

Gustavo Samper, titular de la Cámara Vitivinícola y vicepresidente de la Coviar, sostuvo que "es una medida interesante para el sector, aunque hubiera sido bueno que fuera con un tipo de cambio variable y no fijo".

Desde la Mesa Vitícola, Pablo Martín expresó que "como primera impresión, puedo decir que se trata de una medida positiva. Y que se ha cumplido la palabra en cuanto a distinguir a las economías regionales del resto de los sectores. En resumen es una disposición que suma y sirve".

En un tono más crítico, el presidente de la Federación Económica, Dino Minnozzi, expresó que "se trata de un nuevo parche y no de una medida de fondo. Y puede llegar a tener efectos inflacionarios porque hará falta emitir para comprar los dólares. En otras palabras, se trata de una devaluación en cuotas".

Sobre los efectos de la decisión, Martín Hinojosa, titular del Instituto Nacional de Vitivinicultura, manifestó en declaraciones a Sitio Andino que sobre el efecto esperado dependerá "de la gimnasia exportadora de las bodegas, porque reactiva todo un modelo comercial que apunte a movilizar todo eso, con un doble beneficio: poder liquidar operaciones a un dólar de 300 pesos y para el Estado hacerse de dólares anticipadamente".

 

>> CLAVES

Vigencia
El llamado dólar agro, en el caso del sector vitivinícola, empezará a regir desde el sábado 8 de abril para las ventas de cualquier producto del rubro, particularmente el vino. Para la soja regirá desde el próximo 10 de abril al 31 de mayo con un tipo de cambio a $300.

 

A medias
Para la industria vitivinícola hay una expectativa satisfecha en parte. Es que el nuevo esquema no contempla ni el plazo que reclamaba la industria (180 días), ni el alcance. Quedan afuera las operaciones de comercio exterior ya concretadas y con liquidaciones pendientes.

 

Condiciones
Para poder acceder al flamante dólar agro de $300, será condición que las empresas exportadoras adhieran con sus productos al programa Precios Justos y “aquellas que participan, respetarlo”, según dijo el ministro de Economía, Sergio Massa, en el anuncio.

 

Sequía
También habrá medidas para los productores afectados por la sequía. Por ejemplo podrán acceder a beneficios como la suspensión de intimaciones y embargos de cuentas bancarias, suspensión del pago de anticipo de ganancias y beneficios fiscales.