El gobierno de Uñac implementará un cambio drástico para el Lote Hogar. Para reactivar el organismo y que vuelva a dar el servicio para el que fue creado, otorgar una vivienda digna a los sectores más vulnerables, modificará la ley permitiéndole al organismo adquirir terrenos para construir barrios y, además, recuperar costos, cobrando una cuota simbólica a los futuros beneficiarios. El valor de esa contribución se está evaluando y no está definido. Las autoridades aseguran que los cambios se harán este año y estarán operativos desde 2018.
Para lograr las modificaciones, el Ejecutivo está trabajando en un proyecto de ley que será remitido a la Cámara de Diputados una vez que esté listo. El oficialismo cuenta con amplia mayoría entre los legisladores, por lo que se descarta que será aprobado. Fuentes calificadas aseguraron que si bien no falta mucho para finalizar el proyecto, no será presentado hasta después de las elecciones de octubre.
Pablo Zabala, director del Lote Hogar, confirmó la intención del Ejecutivo explicando que "se comenzará a cobrar una cuota para las nuevas casas que se hagan. La idea no es que paguen una cuota como la del IPV, sino que sea mucho más baja, accesible y simbólica. El recupero se sumará a los recursos que tiene el Lote Hogar e irá destinado a la adquisición de más terrenos".
Según se pudo conocer, el recupero de costos apunta al valor de la mano de obra, dejando de lado lo que cuesta el terreno y los materiales para construir la vivienda, por eso la cuota será, se estima, muy baja.
Por otro lado, Zabala hizo hincapié en las limitaciones de la actual normativa. "Como está planteada hoy la ley, nos resulta difícil adquirir terrenos, por eso pedimos ayuda a los municipios con parcelas. Para llevar a cabo los trabajos, se tiene que hacer el traspaso desde la comuna a la provincia. Esos trámites son largos y eso demoran las obras", dijo el funcionario.
Fondos del Lote Hogar
302 millones de pesos, son los recursos que acumuló la repartición en lo que va del 2017. Parte de esos fondos se destinan al IPV, el resto están guardados para la compra de terrenos.
El Lote Hogar fue creado en 1984 y su destino era clave: "La erradicación de villas de emergencia, evitar nuevos asentamientos por falta de lotes y permitir a las familias de escasos recursos una digna integración en la sociedad", según dice la ley original. Con ese objetivo el gobierno, hasta el 2004, entregaba los materiales para que los beneficiarios del plan construyeran su propio hogar, con apenas una asistencia técnica estatal (arquitectos e ingenieros).
La crisis entre el año 2000 y 2003 hizo que el sistema sufriera desprolijidades, ya que los materiales que se destinaban se vendían y muchas casas jamás se ejecutaban. Incluso salió a la luz la connivencia de exfuncionarios públicos.
Por eso la gestión anterior, en 2005, modificó la ley para finalizar las 2.200 casas que no se habían terminado. A partir de ahí, el Lote Hogar hizo pocas viviendas siendo el último barrio construido el Nº 59, en Chimbas. Todos los recursos que recibía la repartición se destinaron al Instituto Provincial de la Vivienda (IPV), quien se encargó de hacer barrios y de erradicar las villas.
Hoy, con Uñac, el Lote Hogar tiene otro impulso. El organismo ya firmó convenios con varios municipios para construir barrios este año. Los más avanzados son San Martín con 71 viviendas, 25 de Mayo con 116 casas, y Calingasta con un número similar. Las edificaciones del Lote Hogar no son iguales a las del IPV, se entregan sin cerámicos, con hormigón llaneado y sin pintura, logrando que cuesten unos 600 mil pesos cada una, mucho menos que los 900 mil peso del Instituto Provincial de la Vivienda.