A tres días de las Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO), Mauricio Macri brindó una extensa entrevista a un programa de televisión y dejó varias definiciones sobre pobreza y narcotráfico en la Argentina, la crisis en Venezuela y el papa Francisco. Pero quizás el título más llamativo, que el Presidente pronunció sobre el final del reportaje, sea el referido a Cristina Kirchner.

 

En diálogo con Santiago del Moro, conductor de Intratables, Macri recordó las idas y vueltas que existieron en los días previos al 10 de diciembre de 2015, cuando discutió con la administración kirchnerista a propósito del lugar y las condiciones en las que se llevaría a cabo el traspaso de mando.

 

El jefe de Estado se refirió a aquellos días luego de que Del Moro le manifestara que en esa oportunidad el papa Francisco "podría haber unido" a ambas partes. "Por ahí lo intentó y no se supo…", dijo Macri. "Yo no lo llamé para pedirle eso. Era un peludo tan difícil que seguramente no iba a tener éxito", consideró el Presidente. Y remató: "Ella claramente no tenía en su cabeza entregar el mando. Tiene un problema psicológico, debe creer que todavía tiene el mando de la Argentina".

 

 

Cabe recordar que finalmente, luego de un conflicto que se extendió durante varios días e incluyó fuertes cruces entre Macri y la entonces mandataria, la jura oficial tuvo lugar en el Congreso de la Nación y el presidente provisional del Senado, Federico Pinedo, fue el encargado de entregar los atributos de mando en el Salón Blanco de la Casa Rosada.

 

Consultado sobre lo que fue uno de sus ejes de campaña, "Pobreza Cero", el Presidente reiteró que se trata de "una tendencia, un compromiso de todos los argentinos a trabajar juntos para reducir la pobreza". "Si en mi gobierno no bajo el nivel cuando termine, habré fracasado —explicó—. Lo primero que he hecho es decir la verdad. Tenemos un Indec que dice la verdad de la pobreza, la inflación y los números de la economía. Si eso no está sobre la mesa, es imposible que podamos corregir".

 

 

Además, el jefe de Estado volvió a brindar un duro mensaje contra el narcotráfico y subrayó que durante el gobierno kirchnerista "se negaba el avance" del problema. "Se decía que las fronteras estaban bien custodiadas y no había ni radarización", graficó. "Le hemos dado un ataque frontal al narcotráfico. Esta gente es la peor de todas las mafias que tenemos que combatir en este país. Se apropia de los jóvenes y los destruye. La desesperación por consumir los lleva a una locura", dijo. E insistió: "Con el narcotráfico no se jode, los tenemos que echar a patadas de la Argentina".

 

En otro tramo de la entrevista, el Presidente destacó la figura de la gobernadora bonaerense María Eugenia Vidal. "Estoy feliz de que los argentinos la hayan descubierto", expresó. "Todo el mundo me decía que estaba loco, que tenía que acordar con otros, que necesitábamos un hombre para la provincia", recordó. "Le tengo fe y admiración: soy el primer admirador de María Eugenia", añadió.

 

 

Acerca de la crisis que atraviesa Venezuela, Macri recordó que cuando era jefe de Gobierno porteño "la mayoría de los países del mundo decían que no era una dictadura". "Este hombre (Nicolás Maduro) ha cruzado todas las rayas. No sé cómo hace para convivir con las muertes que carga sobre él. Hay mucha gente que ha sido asesinada, no puedo entender que haya argentinos que justifiquen esto", analizó.

 

También habló sobre el papa Francisco, con quien dijo tener una buena relación. "La misma que tuve como jefe de Gobierno", remarcó. "Él tiene la tarea de contener, perdonar, poner la otra mejilla. Eso por ahí algunos lo viven como una traición contra el antikirchnerismo. Él no vive el antikirchnerismo, él profesa el perdón", explicó.