Acompañado por su esposa Juliana Awada, su hija Antonia y una asistente, el ex presidente Mauricio Macri llegó este viernes por la madrugada a París (Francia). Allí deberá llevar a cabo un aislamiento de 14 días junto a su familia antes de partir hacia su destino final, Zúrich (Suiza).
El vuelo AF 229 de la compañía Air France que trasladó al ex mandatario nacional hasta Europa aterrizó en el aeropuerto Charles de Gaulle cerca de las 6:57 hora local (1:57 de la Argentina), alrededor de cuarenta minutos antes de lo que estaba programado.
En su llegada, Infobae pudo acercarse al dirigente de Juntos por el Cambio cuando estaba saliendo de la terminal, pero prefirió no responder preguntas: “Fue un viaje largo”, se limitó a decir. Tras ese comentario escueto, subió a un ascensor cargando las cinco valijas que llevaron y se dispuso a dejar el aeropuerto en medio de calor de la capital francesa, que lo recibió con 38 grados.
Según lo planificado, Macri tiene previsto quedarse dos semanas en París junto a su familia antes de continuar con su itinerario. Durante este tiempo aprovechará para descansar y recorrer la capital francesa, ya que no está obligado a quedarse en el hotel, aunque sí deberá respetar las recomendaciones sanitarias que se encuentran vigentes por la pandemia de coronavirus.
Además, se llevó para leer los dos capítulos finales de su biografía, en la que trabajan hace ya varios meses su ex ministro de Cultura, Pablo Avelluto, y el periodista Hernán Iglesias Illia.
De esa manera transcurrirá el aislamiento de 14 días que Suiza les exige a los visitantes no europeos. Asimismo, el ex mandatario debió someterse a un hisopado antes de tomar el vuelo, otro de los requisitos necesarios para viajar.
Con Juliana y Antonia fueron las últimas tres personas en abordar el avión de Air France que partió a las 13:32 del jueves desde el Aeropuerto Internacional de Ezeiza. Así fue por pedido expreso suyo, además de solicitar un paso rápido y discreto por las oficinas de Migraciones y Aduana. No obstante, no utilizó ninguna de las salas de espera VIP con las que cuenta esta terminal aérea.
Una vez arribado a Zúrich, Macri tendrá una agenda de actividades vinculadas a su nuevo rol como presidente de la Fundación FIFA, puesto para el que fue designado el 28 de enero pasado, pocos días después de haber dejado la Casa Rosada.
El ex jefe de Estado, su esposa y su hija tienen previsto regresar a la Argentina el 8 de septiembre. Una vez en Buenos Aires, los tres deberán cumplir otra cuarentena de 14 días, pero esta vez encerrados en la vivienda que alquilan en San Isidro, siempre y cuando no se modifiquen las características de la cuarentena que rige en el país para ese entonces.
La última aparición pública de Macri fue el 14 de julio, en Paraguay. Hasta allí viajó para almorzar con el ex presidente Horacio Cartés y para reunirse con el actual mandatario Mario Abdo Benítez. Tras su regreso, cumplió con un aislamiento de dos semanas en su quinta Los Abrojos, aunque no faltó la polémica porque el dirigente se alojó primero en su domicilio de la zona norte del conurbano bonaerense y luego sí se desplazó a la histórica residencia familiar.
Antes, le había concedido una entrevista al periodista peruano Álvaro Vargas Llosa, en la que cuestionó el avance del gobierno nacional sobre las libertades de las personas en medio de la cuarentena.
“Estoy más cerca de los argentinos que nunca. Estoy tratando de darle un espacio al Gobierno que fue elegido por el 48% de los argentinos para que ponga en juego lo que ellos piensan, sus propuestas, sus soluciones. Solamente (estoy) intentando levantar la mano y decir ‘cuidado, no avancen sobre nuestras libertades, hagan las cosas sobre lo que es el marco institucional’”, declaró.