a decisión de la Administración de Parques Nacionales de declarar al volcán Lanín como un sitio sagrado intercultural en el que el pueblo mapuche tendrá poder de decisión terminó por enfrentar al gobierno de la provincia de Neuquén con las autoridades nacionales y los referentes de esa confederación aborigen.

El martes, la Administración de Parques Nacionales informó a la Confederación Mapuche sobre la publicación de la declaración 484 que reconoce al volcán Lanín Pijan Mawiza como Sitio Natural Sagrado del Pueblo Mapuche del Parque Nacional Lanín. La medida, que llegó tras un reclamo que los mapuches sostienen desde 2017, fue recibida con entusiasmo por las comunidades, pero generó el rechazo del gobierno neuquino.

El gobernador Omar Gutiérrez consideró que la decisión, que fue tomada sin consultar a su administración, “pisotea las facultades constitucionales de la provincia’’. Y agregó: “Es un atropello a las autonomías provinciales, un acto más de centralismo y una intromisión. Vamos a iniciar las acciones administrativas y legales correspondientes porque se trata de un acto ilegítimo e ilegal”.

Por su parte, la Confederación Mapuche consideró que la decisión es el puntapié inicial para fijar una regulación que garantice la protección del entorno natural y la interrelación entre todos los factores de la naturaleza en un volcán que es muy concurrido por los escaladores y en donde la actividad turística crece de manera acelerada.

Según la declaración, el volcán, al convertirse en un sitio sagrado, será considerado un un lugar que tiene “especial significado espiritual para los pueblos y comunidades, donde el sentido de sacralidad se vincula a la vida, en cuanto a su origen, sostenimiento y continuidad, así como al territorio, enlazándose asimismo con los conocimientos y relaciones culturales de un pueblo ancestral o moderno con su entorno y su sentido de lugar”.

A partir de esta firma, se establece la creación de una figura formal para avanzar con la zonificación del sitio sagrado y el avance en “un mecanismo de trabajo conjunto con el Pueblo Mapuche para la elaboración de un Plan de Manejo del Sitio Natural Sagrado Volcán Lanín-Pijan Mawiza, en el que se definirán los criterios de uso y zonificación, las modalidades de manejo intercultural del sitio y la asignación de los recursos necesarios”.

Para Gilberto Wilipan, werken de la Confederación Mapuche en Neuquén y miembro del Círculo de Autoridades Mapuches del Lanín, la declaración fue recibida con mucha alegría porque incorpora a las comunidades que son parte del Lanín a apropiarse del espacio e involucrarse en la protección de su diversidad.

La primera duda que aparece ante este mayor protagonismo de las comunidades es si va a cambiar la relación que tienen el resto de los neuquinos con el volcán. “Por supuesto que va a cambiar para los visitantes, así como se venía desarrollando íbamos rumbo a perder la biodiversidad del Lanín”, aseguró, aunque aclaró que tampoco quieren “crear un cuco, o que digan que a partir de ahora no los dejamos entrar más”.

Por el contrario, las comunidades mapuches buscan regular el uso del volcán para alejarse de la mirada mercantilista y los ingresos de turistas “a diestra y siniestra” que van deteriorando el entorno natural. A su vez, buscan potenciar el desarrollo de las comunidades vinculadas con el volcán, que venden artesanías de telar o tejido a palillos. También pretenden crear la figura de los guardianes, un correlato de los guardaparques que se autocapacitarán para velar por la protección del ambiente pero sin perder la identidad y los principios de la cultura mapuche.

Por su parte, el gobernador Gutiérrez aclaró que “hay muchos ejemplos de diálogo institucionales” en referencia a los esfuerzos que hace el Ejecutivo provincial por respetar la convivencia con el pueblo mapuche. Entre ellos, nombró el co-manejo en la Corporación Interestadual Pulmarí o el reciente proceso de Consulta Previa, Libre e Informada por el gasoducto Néstor Kirchner.

Sin embargo, señaló que “el Lanín es un símbolo de la identidad neuquina y es de todos los neuquinos y neuquinas. Forma parte de nuestra geografía e identidad cultural. Está en nuestro escudo provincial, el himno provincial y nuestra bandera”. El werkén, en cambio, fue más duro y aseguró que Neuquén usurpó el Lanín del territorio mapuche y que las concesiones se obtuvieron sólo a partir de la presión política que ejercen las comunidades.

“Si dice que es ilegal, es porque no respeta el reconocimiento que nos hace el Estado en la Constitución Nacional y la provincial”, dijo Wilipan y agregó que, a partir de la declaración, se organizó una reunión urgente en la Confederación para avanzar con la zonificación y crear un mapa del sitio sagrado, ya que consideran que Parques Nacionales sólo hace trabajos a cuentagotas y nunca destina recursos para las necesidades de las comunidades.

“El Lanín no es solamente la base, los senderos y la cumbre, es una vida más que está interrelacionada con las vidas alrededor, con los ríos, lagos, lagunas y pehuenes, y eso es lo que queremos plasmar en el mapa de lo que llamaremos jurisdicción mapuche”, concluyó el werkén.