Hay malestar entre los  comerciantes que tienen su local sobre Avenida Ignacio de la Roza, en el tramo comprendido entre Hipólito Yrigoyen y Circunvalación, en Capital.  Es que la obra lleva  un año y según dicen, recién terminará a mediados de este 2019. 

 

Algunos comercios cerraron sus puertas y otros  hablan de una caída en las ventas del 50 por ciento. "Sentimos que nadie nos da una respuesta o un principio de solución. Es incómodo y difícil para la gente llegar hasta acá", reconoció el dueño de Multiplásticos Colombraro.

 

En el caso de la Avenida Central, la etapa que actualmente está en obra va desde Paula Albarracín de Sarmiento hasta la conocida Esquina Colorada. Se trata de una obra pensada para agilizar el tránsito hacia el Oeste del Gran San Juan y crear una nueva vía de vinculación con Rivadavia, un departamento que ha crecido sensiblemente en viviendas y población en los últimos años.

Pero el problema, en el caso de los negocios ubicados en las proximidades de las obras, es que se han visto perjudicados por la construcciones porque al ser más difícil circular, han perdido clientes.  En un caso puntual, hasta se produjo la rotura de una vidriera por una piedra que levantó un vehículo al pasar por la obra. 

 

Un alivio en tanto malestar

El Concejo Deliberante eximió el pago de la tasa que pagan los negocios por actividad comercial.