En los últimos días, tres casos de presunto maltrato infantil -dos de ellos en su peor versión como es el abuso sexual- se transformaron en una terrorífica seguidilla que llevó a indagar cual es la situación actual en general de la provincia. Marcelo Bartolomé, al frente de la Dirección de la Niñez de la Provincia, dependiente del Ministerio de Desarrollo Humano, informó que según un indicador como es la cantidad de denuncias que se realizan a la Línea 102, la tendencia se mantiene estable en líneas generales, al realizar la comparación con años anteriores. Y la cifra continúa en los 4.000 llamados aproximadamente, durante todo 2018.

Bartolomé indicó que el 50% de las llamadas corresponden a casos englobados a situaciones de negligencia, como puede ser por ejemplo un niño de 3 años caminando sólo en la vía pública. Luego, el 25% se encuadra en casos concretos de violencia infantil, en los que se incluye el presunto abuso sexual. Bartolomé reconoció que las cerca de 1.000 llamadas en el último año significan un alto porcentaje. Luego, el resto se distribuye en un 15% de llamadas que no son competencia de la Dirección, como situación de abandono de un adulto mayor (la denuncia se toma igual y se deriva al área pertinente) y un 10% final que son denuncias sin sustento real.

Luego de aclarar que las llamadas a la Línea 102 es la primera aproximación de medición y que las cifras definitivas teniendo en cuenta todas las "bocas de entrada’ estarán definidas el próximo mes -por ejemplo se distinguen los casos que cuentan con más de una denuncia-, Bartolomé señaló que además que se mantienen estables la cantidad de llamadas, lo mismo sucede con los porcentajes que conforman cada grupo. Y luego agregó: "Sí podemos advertir que a través de los oficios judiciales, hay un incremento de presunción de abuso sexual y mantienen las cifras los casos de violencia familiar".

En la misma sintonía, Sergio Cúneo , director del Centro de Abordaje Integral de Niños, Niñas y Adolescentes Víctimas (ANIVI) -dependiente del Poder Judicial-, afirmó a DIARIO DE CUYO en su edición del pasado 16 de diciembre que desde la creación del centro en marzo de 2007, recibieron 1.010 denuncias de abuso sexual infantil, lo que arroja un promedio de 1,5 por día. "Si bien es una realidad preocupante, estamos trabajando no sólo para garantizar el acceso a la Justicia del niño adolescente víctima, conteniéndolo durante todo el proceso de investigación para evitar su revictimización. También coordinamos acciones con otros organismos como Salud Pública, Desarrollo Humano y el sector Docente, que son las alarmas más importantes para detectar, prevenir y abordar esos hechos", dijo Cúneo, quien agregó: "en general, la edad de los chicos abusados oscila entre los 9 y los 15 años (aunque hubo hechos contra niños de 7 y 3 años). Que con más frecuencia el delito afecta a las niñas y que el tipo de maniobra delictiva predominante son los abusos sexuales simples, es decir manoseos y otras prácticas que no llegan al acceso carnal o la violación".

Bartolomé insistió en la importancia de conseguir "un sistema de información estadístico que realmente nos permita desmenuzar todas las situaciones, para poder generar políticas publicas cada vez mas eficientes y eficaces, respecto de los problemas que tenemos y como abordarlos. Hay que visualizar a la luz de la totalidad de la información".

A la luz pública

> Miércoles 2 de enero
Una beba de casi 2 años, con problemas crónicos de salud, ingresó al Hospital Rawson con lesiones en la zona vaginal y la Justicia investiga un presunto caso de abuso sexual. Los padres de la pequeña apuntaron públicamente a un enfermero que la cuidaba.

> Miércoles 2 enero
Vecinos del Barrio Conjunto 7, Chimbas, llamaron al 911 para denunciar que escuchaban gritos y llantos en una de las viviendas. Presuntamente, golpeados por el padre, una niña de 10 años presentaba traumatismo de codo y muñeca izquierda y un niño de 13, politraumatismos.

> 29 de diciembre
Una nena de 13 años permanecía en internada en Pediatría del Hospital Rawson por los golpes que recibió de parte de su padrastro la noche anterior, según denunció su madre a la Policía. El caso sucedió en una casa del Barrio Bilbao II, en 9 de Julio.