Repasando anteriores entregas, en Rápidos y Furiosos 5 Sin Control de 2011, Dom y su equipo acabaron con el infame capo de la droga brasileño Hernán Reyes y diezmaron su imperio en un puente de Río de Janeiro. Lo que no sabían era que el hijo de Reyes, Dante (Jason Momoa), fue testigo de todo y ha pasado los últimos 12 años ideando un plan maestro para cobrarse venganza. Así inicia esta nueva parte, la décima de la saga, que estrena hoy en los cines sanjuaninos y a nivel nacional. El plan de Dante esparcirá a la familia de Dom desde Los Ángeles hasta las catacumbas de Roma; desde Brasil, hasta Londres; y desde Portugal hasta la Antártida. Se forjarán nuevos aliados y resurgirán viejos enemigos. Pero todo cambia cuando Dom descubre que su hijo de 8 años es el objetivo final del plan maestro. Con un villano a la altura, Toretto y su clan buscarán darle otro toque más de acción a la saga bajo loa dirección de Louis Leterrier, quien será el encargado de dirigir la próxima y última película.