Hace poco tiempo señalábamos que cada vez era más fácil advertir el creciente aumento de conductores de motos que se dedican al transporte de alimentos a domicilio mediante la modalidad de delivery, una actividad que los hace andar a gran velocidad con el consiguiente peligro que esto implica. También decíamos que hasta ahora las exigencias para realizar este trabajo no preveían que el conductor del rodado deba tener carnet o licencia profesional. Simplemente se pide que tenga actualizada la licencia otorgada por Emicar SA, que en el caso de la que se expide para conducir una moto es la denominada clase "A" que también permite conducir ciclomotores y triciclos motorizados.
Los delivery, en su mayoría, trabajan para empresas nacionales y multinacionales que los contratan con sus motos, de cualquier cilindrada, para cumplir con un trabajo en el que les exigen velocidad, para concretar rápidas entregas de productos alimenticios que por lo general deben ser distribuidos a una temperatura adecuada. Este requerimiento es lo que los hace circular a altas velocidades, en muchos casos transgrediendo normas de tránsito y exponiéndose a posibles accidentes personales, como caídas o choques contra elementos de la vía pública o provocados por otros conductores que encuentran por las calles, sin posibilidad de esquivarse.
La necesidad de que estos trabajadores cuenten con una licencia profesional y sean objeto de mayores controles por parte de la Policía de Tránsito de la Provincia está relacionada con el hecho de que son motociclistas que, en ocasiones, transitan muy imprudentemente complicando la circulación del resto de los vehículos y exponiéndose a situaciones que ponen en peligro a otras personas ajenas.
Es un hecho que hasta ahora Emicar no ha habilitado la categoría profesional para los conductores de motos. Otorga la correspondiente licencia de conducir sin tener en cuenta de qué manera va a utilizar el rodado, si es simplemente para llegar a un lugar de destino que puede ser el trabajo o, como en este caso, para trabajar utilizando la moto como principal medio de transporte, lo que implica que se ande todo el día en ella.
Para esa gente, precisamente y como ya hemos señalado oportunamente, haría falta un curso previo en el que se impartan conocimientos teóricos y prácticos respecto a la forma en que deben conducirse estos rodados. Resulta de vital importancia que los motociclistas conozcan a la perfección hasta dónde se puede llegar con la actual enseñanza sobre la forma de conducir una moto, a fin de que quienes lo hagan conduzcan con solvencia y también con responsabilidad y mucha precaución, para evitar muertes como la ocurrida recientemente en el Barrio Bancario, en Capital.
