C. C. terminó sus estudios secundarios en el CENS del RIM 22 y ahora sueña con ser peluquera y abrir su propio local. Mientras, espera que la Justicia haga lo suyo. "Sólo me concentro en olvidar y seguir adelante", dijo.

 

Denunciado por al menos dos pacientes a las que supuestamente abusó sexualmente en su consultorio, el pasado jueves fue detenido el médico Celestino Ambrosio Elías Porras (68). Se trata del mismo profesional investigado por el escándalo de de la beba caucetera que aparentemente fue entregada por su madre (ver aparte).

En exclusiva para DIARIO DE CUYO, una de las presuntas víctimas, C.C. (18, chimbera), contó cómo ocurrieron los supuestos ultrajes. Según su relato, todo ocurrió el pasado sábado 13 de octubre, cuando asistió con su madre al consultorio de Elías en el Barrio Parque Rivadavia Norte, en Rivadavia. La joven estaba haciendo un tratamiento para combatir su sobrepeso y cada mes debía asistir al consultorio para revisar su dieta y hacer los cambios necesarios. Sin embargo, ese día, alrededor de las 12.30, todo cambió. La chica dijo que, en un momento dado, su madre debió salir a atender el llamado de un gasista, quedando ella y el médico a solas. E indicó que el acusado aprovechó ese momento para abusarla.

Según su versión, primero le pidió que subiera a la balanza y, tomándola del torso, le dijo que tenía "retención de líquidos" y por eso le solicitó que se pusiera de espaldas contra la camilla y que se subiera la remera a la altura de los pechos. Fue ahí cuando -explicó- le apoyó el miembro por atrás. "Sentía cómo se apoyaba contra a mí", recordó. La joven contó que luego le pidió que "moviera las caderas", frotándose contra ellas. "En ese momento no entendía nada", dijo.

Pero la cosa no terminó ahí. Según denunció, después le pidió que se acostara boca abajo y se bajara la calza. Sin entender lo que estaba pasando, la joven dijo que sólo se la bajó un poco, pero Elías "de un solo tirón me la bajó hasta los tobillos". "Yo no entendía nada, sólo me quedé quieta", aseguró. Y dijo que, apoyando su miembro nuevamente, Elías le pidió que "arqueara la espalda y flexionara las rodillas", frotándose una vez más contra su cuerpo. "Mientras me manoseaba se reía", recordó con angustia.

Cuando todo terminó, se vistió rápidamente y aguardó a que su madre regresara para luego salir del consultorio. "Él actuaba normal, como si nada hubiera pasado", expresó.

La joven al día siguiente le contó a su novio, pero con sus padres guardó el secreto. Recién les dijo el pasado lunes. "Cuando le conté a mi papá lo quería matar", rememoró la chica.

La denuncia fue radicada el martes en la Policía, y comenzó a entender en el caso el juez Benedicto Correa, titular del 5to Juzgado de Instrucción.

Elías fue arrestado en la mañana del último jueves por policías de Seguridad Personal en la puerta de los consultorios "MC Medicentro", donde también tiene un consultorio.

Mientras, a C. C. le cuesta olvidar lo ocurrido. "No lo perdonaría, pero siento lástima por su familia", sentenció.

 

Por suprimir la identidad de una beba

 

En junio de este año, Elías había sido detenido acusado de haber hecho pasar por muerta a una bebé con un certificado de defunción. Y luego haber firmado otro de nacimiento con la misma criatura. Eso, para que Rosa Agüero se pudiera quedar con la hijita recién nacida (el 22 de marzo de 1998) de Vanesa Sánchez, joven a la que acogió en su casa de Caucete porque estaba en la calle. Después de 20 años, la mujer denunció la maniobra y el médico cayó por supresión de identidad y falsificación de documentos. Sin embargo, la pericia en un escrito reveló que Sánchez la había entregado voluntariamente y salió bajo una fianza de $60.000.