Ocho personas fueron detenidas, entre ellas un policía en actividad y otro retirado, acusadas de integrar una banda narco que utilizaba joyerías, cuevas financieras y boliches para lavar el dinero de la venta de estupefacientes, tras una serie de allanamientos realizado en Mendoza, donde secuestraron más de 120 millones, entre pesos, euros y dólares, como así también armas de fuego, automóviles y drogas, informó hoy la Dirección General de Aduanas (DGA).
La investigación fue efectuada por la Policía de Mendoza y la DGA bajo las órdenes del Juzgado Federal 3 que dispuso 51 allanamientos sobre propiedades relacionadas con una organización que operaba en la mencionada provincia cuyana.
Según las fuentes, la banda poseía estudios contables y cuevas financieras dedicadas a la compraventa de moneda extranjera sin la debida autorización del Banco Central de la República Argentina (BCRA).
Además, contaba con numerosos locales que funcionaban como pantallas para el blanqueo de divisas: al menos 7 joyerías, una casa de antigüedades, un bar y dos boliches en los que, se presume, vendían estupefacientes al menudeo.
Asimismo, los procedimientos advirtieron trampas en cinco de las joyerías -esto es, recintos conformados a partir de paredes falsas, dobles fondos y espacios ocultos en muebles-, que contaban con cierres electrónicos para ocultar dinero ante posibles medidas judiciales.
Además, seis de los locales fueron clausurados por abocarse a rubros diferentes de aquellos para los cuales habían sido habilitados.
Las fuentes añadieron que ocho personas fueron detenidas, de las cuales dos tenían vínculos con la Policía de Mendoza.
Uno de los sospechosos es un oficial retirado de la fuerza que prestaba servicios de seguridad en los locales vinculados con la banda y el otro, por el contrario, se encontraba cumpliendo servicios como oficial en actividad.
De acuerdo a la Justicia, este policía le cobraba periódicamente una suma de dinero a la organización delictiva en calidad de cobertura frente a riesgos a los que pudiera estar expuesta, como controles y procedimientos, incluso de otras fuerzas.
Tras los allanamientos, la Policía y la DGA secuestraron seis vehículos, 42.631.230 de pesos, 160.648 dólares, tres armas de fuego, 40 máquinas de contar dinero, cinco balanzas, joyas, relojes, cannabis y MDMA.
También se incautó de divisas en efectivo de origen variado: 24.200 euros, 450 libras esterlinas, 723.483 reales, así como también 2000 pesos uruguayos, 7.471.560 pesos chilenos y 520 pesos mexicanos.