Segundo. Fabricio Torres, de libre, marca un tanto para la Argentina ante la salida del arquero trasandino, Diego García. Una segunda presentación en el Mundial que dejó sabor a poco.

La Selección argentina no dejó dudas de ser más equipo que su par de Chile. Cuando tuvo la bocha demostró que tiene capacidades para armar su juego. Para lastimar a su ocasional adversario. Y sigue sacando a relucir una saludable vocación de marca, aunque por ahí presenta algunos desequilibrios en defensa debido a sus distracciones y faltas innecesarias que a la larga resultan un auténtico dolor de cabeza.

El equipo trasandino se defendió bien a su vez y con eso le cerró los caminos en ataque a los argentinos. Entonces, ante menos variantes, al equipo de Juan Manuel Garcés le quedó a veces depender de sus capacidades individuales. Y, en eso, así como en el primer partido levantaron las banderas del equipo Castro y Ortiz, ayer lo hicieron Alonso y Ojeda cuando estuvieron en cancha. También es cierto que de nuevo Matías Bridge fue un gigante en el arco tapando (casi) todo y que Fabricio Torres volvió a entrar con el tablero empatado y desequilibró con un gol de libre. Como el día anterior contra España se fueron al descanso igualados en dos.

Y en el complemento el partido le dio espacio al frenesí absoluto. A los argentinos porque pese a estar ganando seguían buscando otro gol y a los chilenos porque creían en ellos mismos y buscaban empatar. Ese vértigo casi le juega una mala pasada a los argentinos, porque una bocina (la que suena de la mesa) la salvó de un empate que logró Chile. Y después, en la recta final del partido, Argentina sacó a relucir su jerarquía y tenía la victoria. Pero apareció el árbitro portugués que no sólo cobró un gol para los chilenos que no fue sino que después pitó una falta para los trasandinos que fue libre, gol y empate.

En éstos días la Selección Argentina tendrá que hablar mucho para solucionar algunos problemas. Al menos que no haya tanta ansiedad.

 

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Eficacia

Chile se paró firme atrás y defendió con mucho despliegue, algo que complicó en cierta manera el juego de Argentina. En un partido parejo, la albiceleste sacó ventaja cuando tuvo su primera chance (un penal). Mientras que Chile la desaprovechó por la misma vía.

 

Cambiante

El partido en el último tramo del primer tiempo siguió equilibrado. Chile empató al aprovechar una tarjeta azul a Olmos y fue de nuevo a remar para la Albiceleste. Encontró luz con un libre de Torres pero de nuevo se lo empató Fernández.

 

Definición

El partido siguió con el mismo equilibrio e idéntico vértigo en el complemento. La Argentina siempre sacaba la diferencia. Chile se ocupaba de empatarla. Tal vez en ese punto es cuando la Albiceleste tendría que haber enfriado el panorama.

 

 

  • España se recompuso

Luego de la caída en el debut, los españoles ayer se acomodaron en el torneo con el 9-20 sobre Suiza, que hoy se medirá contra la albiceleste. En tanto, por la otra zona, Italia dio cuenta 5-2 sobre Colombia, mientras que Portugal no tuvo contemplaciones ante los Estados Unidos: 32 a 1.