Confianza. Montejano aporta velocidad, entrega y frialdad a la hora de definir. Ayer contó que atraviesa su mejor momento y se ilusionó con llegar lejos con Desamparados.

 

Se llama Matías Montejano. Tiene 22 años, es oriundo de Río Cuarto y el domingo fue una de las figuras en el Bº Patricias Sanjuaninas. El cordobés fue autor del gol que liquidó el triunfo de Desamparados ante Círculo Deportivo Otamendi (3-1) y llamó la atención de propios y ajenos por su entrega. Ayer, en su día de descanso, contó de sus aspiraciones y recordó sus inicios cuando no era el encargado de hacer los goles, sino de evitarlos.

"Es una linda victoria porque la necesitábamos, afuera el ambiente estaba medio tenso, la gente ya estaba impaciente pero nosotros nos mantuvimos concentrados. Cuando ellos nos hicieron el gol nosotros seguimos yendo al frente y eso es muy valorable", contó analizando la primera victoria de la temporada. Otamendi había pegado en el inicio y Desamparados recién en el complemento logró revertir el marcador: "No habíamos jugado bien el primer tiempo pero en el segundo tiempo mejoramos y conseguimos un triunfo que es un plus de confianza. Necesitábamos un triunfo para pensar en lo que viene, estoy convencido que ahora las cosas serán distintas", expresó. El riocuartense fue una de las figuras del triunfo. Luchando, bajando para recuperar y aprovechando al máximo su velocidad en ataque. Sportivo ya ganaba 2-1 cuando de contragolpe, Tapia lo dejó mano a mano a Montejano para que fuera a liquidarlo y el cordobés no dudó. Sin reparos, definió por encima de la figura del arquero bonaerense decretando la victoria víbora. Fue su primer gol en un torneo federal y así lo definió: "Ricky (Tapia) me reclamó el pase al medio, pero ni siquiera lo vi, tenía el arco entre ceja y ceja, nos podía pasar como con Sol de Mayo que no lo cerramos y nos empataron. El gol fue especial para mí, porque fue mi primer gol en un torneo y porque se te vienen a la cabeza todo lo que vos dejás para estar acá. A mí siempre me tocó remarla desde atrás y ese gol fue como un premio". Su tonada cordobesa dejó entrever su emoción recordando ese momento, es que para Montejano, esta es su primera experiencia fuera de su Río Cuarto natal y para el menor de los tres hermanos Montejano, no fue fácil tomar la decisión de dejar a sus padres Gabriel y Silvia.

El pibe comenzó en la escuelita de Estudiantes de su ciudad con apenas 4 años. Como hincha fanático de San Lorenzo y de Sebastián Saja quería ser arquero. Lo hizo durante toda la escuelita de fútbol hasta que a los 12 años decidió cambiar de puesto. "Guillermo Nuñez era el técnico, él me dijo que me quería ver adelante porque habían llegado muchos arqueros a probarse y a mí me gustó y quedé. Incluso hubo años que yo jugaba el primer tiempo en el arco y el segundo tiempo pasaba a jugar de delantero", comentó. En los entrenamientos en Puyuta, sobre todo cuando Magistretti realiza fútbol reducido, Montejano aprovecha para ponerse bajo los tres palos. ¿Si Crusat y Boiero tienen competencia?, entre risas el riocuartense confesó: "Que se cuiden porque estoy bien para reemplazarlos", bromeó.

Sobre su actual club, expresó: "¿Qué me sorprendió de Desamparados? lo pasional que son sus hinchas. Vi gente que va a pintar las paredes del club o a ayudar en lo que haga falta. Ese día del aniversario, eran las doce de la noche, llovía y ellos estaban en la plaza festejando y después la caravana al otro día. En la cancha se hacen sentir y eso es lindo, te genera una motivación", expresó.

Desamparados el domingo visitará por la 6ta fecha a Camioneros, en Buenos Aires.

"Sportivo está para pelear a lo grande. Vamos a clasificar y después vamos a ir por todo".

MATÍAS MONTEJANO – Delantero de Desamparados