La Fiscalía pidió 14 años de prisión para Julieta Silva, la joven que atropelló y mató a su novio rugbier, Genaro Fortunato, a la salida de un boliche en Mendoza el 9 de septiembre de 2017. El fiscal Guzzo consideró como atenuante el estado de "emoción violenta" de la joven, pero pidió que no siga presa en su casa. La petición sorprendió a los familiares de la víctima, que buscan que la chica sea condenada a perpetua. Para la querella se trató de un homicidio agravado por el vínculo, que tiene la perpetua como única pena posible. Esa vez discutieron y, cuando se quisieron ir, Fortunato intentó subirse al auto de la acusada, pero ella no lo dejó: aceleró y, por el impulso, el joven se cayó al suelo. Ella se fue, hizo un giro en U y le volvió a pasar por encima.

