La mujer de 58 años asesinada en su casa de la localidad puntana de Concarán murió a raíz de heridas de arma blanca en el cuello que le provocaron una hemorragia y shock hipovolémico, mientras que por el femicidio continúa detenido su esposo de 62, informaron hoy fuentes judiciales.
De acuerdo al informe preliminar de la autopsia al cuerpo de Margarita Azucena Quiroga (58), esta murió por las puñaladas en la zona del cuello, aunque también presentaba múltiples heridas cortantes en la cabeza, rostro, tórax, brazos y piernas.
Por su parte, el esposo de la mujer, Vicente Pereyra (62), tenía manchas de sangre en su ropa y marcas en su cuerpo compatibles con signos de defensa de la víctima, dijeron los informantes.
Según las fuentes, el imputado continuaba hoy alojado en la Alcaidía de la UROP III de Concarán y mañana será imputado formalmente por las fiscales de la causa, Débora Roy Gitto y Lorena Ohanian por el delito de "homicidio agravado por el vínculo".
El hecho fue descubierto el sábado en la vivienda del matrimonio, en dicha localidad ubicada unos 130 kilómetros al norte de la capital de la provincia de San Luis.
La Policía fue alertada por las hijas de Quiroga, que encontraron a su madre tirada en la cocina-comedor de la casa, con evidentes signos de violencia.
Tras descubrir que la mujer había sido asesinada, personal policial detuvo ayer por la mañana al sospechoso cuando se hallaba a unos 7 kilómetros de la escena del crimen, cerca del río Las Cañas, a metros de la ruta provincial 6.
El de Quiroga se trató del segundo femicidio cometido en Concarán este año y el tercero en la provincia de San Luis.
En la Secretaría de la Mujer, Diversidad e Igualdad indicaron que un equipo multidisciplinario está trabajando en el caso y brindando contención y acompañamiento a la familia.