Tenía varios modos de asegurarse el silencio de la niña: le pegaba, amenazaba con hacerle lo mismo a su hermanita o le decía que su mamá podría ir presa. Pero la más terrible de esas maniobras consistía en decirle que él era brujo y que le saldrían verrugas si acaso lo delataba. Desde que tuvo 8 años y hasta un mes antes de cumplir 14, la niña vivió sumida en un tormento. La angustia de la trampa le había calado tan hondo, que cuando tuvo 12 años empezó a cortarse las muñecas, aunque en esas ocasiones lo único que le decía a su mamá era que se sentía sucia, que nunca iba a encontrar a alguien que la quisiera. Fatiga, dificultad para concentrarse, tensión, rigidez corporal, nervios, depresión, llantos, sensación de indefensión y sueños terroríficos de tipo persecutorio fueron los indicadores más dañinos que detectó la psicóloga que la entrevistó en el Anivi, junto con una autoestima baja, sentimientos de desesperanza y ninguna expectativa de futuro. Pero luego de muchos años de callar y de soportar lo que le hacía su tío cuando tenía la oportunidad de quedar a solas con ella, un día se animó y rompió el silencio: la noche del 23 de septiembre de 2019 le contó una parte de su traumática verdad a su mamá. "Mamá, el tío me abusa desde los 8 años, él me daba mercadería y plata para que yo le entregara mi cuerpo y si no lo hacía me decía que iba a agarrar a mi hermanita más chica, que no dijera nada", escuchó la mujer. Dos días después, puso la denuncia.
Hoy la niña tiene 15 años y 56 el sospechoso. Es un empleado municipal de Calingasta que cuando le tocó defenderse negó los hechos y aseguró que, por el contrario, cuando la madre de la niña se separó, él los ayudó económicamente y siempre trató a la niña con respeto.
Sin embargo el relato de la menor, el informe del psicólogo en el que asegura que la niña no es mitómana, no tiene tendencia a fabular y presenta los síntomas típicos de los niños abusados, fueron pruebas contundentes para el juez Guillermo Adárvez (Tercer Juzgado de Instrucción), que ahora decidió procesar con prisión preventiva a ese hombre, por el delito de abuso sexual con acceso carnal agravado, porque cuando los hechos sucedían estaba a cargo del cuidado de la menor, dijeron fuentes judiciales.