A contramano de muchas empresas y emprendimientos que perecieron con la cuarentena impuesta para enfrentar la amenaza del Coronavirus, hay un grupo empresarial local que no solo tuvo demanda de trabajo sino que se dio el tiempo suficiente para pensar en los vínculos de sus trabajadores. Esta inquietud la canalizaron  por medio de mensajes diarios de aliento, after offices para compartir un cafecito o un mate cada uno desde su casa y para charlar temas de la vida cotidiana en aislamiento, clases de yoga o de inglés on line, newsletters con sugerencias de películas, recetas o juegos para hacer en familia y hasta conciertos a cargo de los músicos del equipo, entre otras propuestas que por ahora tuvieron aceptación masiva entre las personas involucradas. La experiencia llevada a cabo en Wes, una pyme con base en San Juan pero que trabajan en redes desde distintos puntos del país y del mundo inclusive, no tiene otros antecedentes en la provincia.

Hace 9 años que se instaló Wes en el mercado como empresa de tecnología e innovación. Se dedican, entre otras cosas, a transformar negocios analógicos o cara a cara, en comercios digitales por ejemplo. Para eso asesoran, aportan conocimientos y herramientas digitales. Justamente por esas razones es que en la pandemia por el Covid-19, cuando la recomendación sanitaria era quedarse en casa y hacer todo trámite, compra o consulta on line, ellos tuvieron mucho para aportar a sus clientes que, en su mayoría, se encuentran en Estados Unidos, además de Argentina y otros países de Latinoamérica.

No ajenos a esta realidad, los mismos empleados reforzaron el trabajo desde sus domicilios, modalidad que para ellos no es nueva ya que si bien esta pyme tiene dos sedes físicas en la provincia, tiene repartidos a sus trabajadores entre las ciudades de San Luis, Córdoba, Buenos Aires, Rosario pero también en Latinoamérica (como Perú) y el mundo (Miami e incluso China). Claro que en estas circunstancias se hizo más profundo ese trabajo porque en los 80 días de cuarentena nadie fue a las oficinas ubicadas en Trinidad ni a las de Capital. 

"En general no fue complicado el home office al ser una empresa nativa digital ya aplicábamos el trabajo remoto. Sin embargo para algunas personas representó un desafío el hecho de hacerlo de manera extendida en el tiempo, para lo cual se brindó un gran acompañamiento desde la empresa”, coinciden el CEO de la empresa Daniel Baca y el gerente de Marketing, Luis Maza.

Justamente en esa necesidad de estar más cerca de cada trabajador es que el área que ellos llaman People Care que la describen como mucho más que una oficina de Recursos Humanos e inclusive con más compromiso en el capital humano para que pueda desarrollarse tanto a nivel personal como profesional- puso a funcionar todos su potencial. Según describen los responsables de este espacio que siempre existió en la empresa, Javier Picón y las especialistas Ángeles Jiménez y Agustina Serrano, comenzaron a enviar consejos, sugerencias, contactos telefónicos vía newsletter o llamados una o las veces que fueran necesarias por semana.

Pero esto no fue todo. Apostaron a compartir y acompañar activamente.

Foto: colaboración Luis Maza
  • Entre la diversión y la contención

"Como empresa entendemos que nuestro principal activo es la gente y creemos firmemente que poniendo el foco en el éxito de las personas, el éxito de la compañía está asegurado. Por este motivo es que veníamos trabajando en valores como la cercanía, el establecer vínculos fuertes y desarrollar confianza, entre otras actitudes que inevitablemente se traducen en el compartir con el otro. Pero el hecho de no estar presentes físicamente, nos obligó a pensar de manera creativa para poder mantener iniciativas que incluyeran a todos los que trabajamos. Lo positivo de todo esto es que nos dejó muchas herramientas para pensar en la gente de una forma más abarcativa”, resumen desde la empresa.

Puntualmente cuentan que en estos días de cuarentena, más allá de lo laboral, destinaron tiempo y esfuerzo para no sólo mantener la relación de compañeros. "Estamos convencidos que mejoramos la relación entre nosotros en estos días. Es que debido a la situación que vivimos, tuvimos que ponernos creativos a la hora de contactar a la gente, y de buscar iniciativas que pudiéramos llevar a cabo a la distancia. Al final, logramos que se sumara gente que antes no participaba tanto y que la mayoría lo viviera como un momento de disfrute”, dicen con orgullo quienes están al frente de la oficina de People Care, nombre tomado de iniciativas similares de empresas de diferentes puntos del planeta.

¿Cómo lo lograron? "Implementamos una comunicación constante vía mensajes instantáneos, "oficinas virtuales” en las que programamos una conferencia en línea de cualquier tema de interés para conversar entre todos un día de la semana, after office con cafecitos, clases on line de inglés, yoga y otros ejercicios de gimnasia, newsletters con sugerencias de actividades para realizar en cuarentena como títulos de películas, libros, música, ejercicios, recetas, actividades para compartir con los chicos. Tuvimos encuentros para compartimos y valorizar los logros de nuestros propios compañeros. Por ejemplo, una tarde escuchamos CD’s grabados por algunos de los integrantes del equipo que son músicos, otras veces leyeron sus escritos quienes tienen una veta literaria, celebramos la recibida de uno de nuestros compañeros y hasta disfrutamos del envío de desayunos a los que cumplen años”, ejemplificaron.

Otra acción que puso en marcha la compañía fue mutar el beneficio de descuentos que tienen los empleados en gimnasios que por el momento estaban cerrados- por una quita similar para la suscripción en Netflix.

La participación en este tipo de propuestas o actividades no es obligatoria, sino que se suma quien tenga ganas. Inclusive las sugerencias no sólo están limitadas a los responsables de organizarlas, sino que pueden acercarlas los mismos involucrados. Por el momento, este sistema para generar cercanía entre los empleados no ha sido compartido con los clientes o la comunidad empresarial que los rodea, de todos modos, no lo descartan. Inclusive que puedan ofrecerlo para replicarlo en otros ámbitos laborales. Es más, como muchas prácticas impuestas por el Coronavirus, las propuestas recreativas y de contención parece que llegaron para quedarse, al menos en el mundo de Wes. "Todo cambio que vemos que resulta algo positivo en la empresa lo mantenemos, independientemente del origen que haya tenido. Ojalá más empresas además de pensar estrategias, puedan priorizar el vínculo entre las personas que allí trabajan”, dicen felices de sus nuevas rutinas.