Sin faltantes. Desde Salud Pública de la provincia dijeron que en San Juan no hay faltantes de dosis de estas vacunas de prevención.

 

Quien esté pensando en viajar a Brasil no sólo tendrá que armar valijas y organizar traslados y alojamientos, sino que tendrá que incluir en los preparativos el único pinchazo de por vida de la dosis contra la fiebre amarilla, una enfermedad viral que se transmite a través de la picadura de mosquitos silvestres o urbanos. Esto es así porque en el vecino país se ha declarado un alerta por esta patología, que a esta altura del calendario ha registrado más de una treintena de casos y más de 20 fallecimientos. Pero no todos deben vacunarse: sólo aquellos que van a las zonas de posible contagio.

Si bien las autoridades brasileñas no exigen el carnet de vacunas junto al pasaporte o DNI para poder ingresar, sí en cambio recomiendan precaución sanitaria desde la Organización Mundial de la Salud.

Según Sonia Ruarte, responsable del Programa de Inmunizaciones de la provincia, la vacunación contra la fiebre amarilla se realiza todo el año, la afluencia de interesados se ha concentrado en los dos últimos meses, lógicamente motivado por el turismo. En la mañana del miércoles pasado se llegaron a colocar 180 dosis.

“De todos modos hay dosis suficientes para quien lo necesite”, comentó la médica e indicó que quienes piensen en viajar tendrán que estar atentos a los lugares y horarios (ver recuadro) donde Salud Pública ha establecido su colocación de manera gratuita y para la población entre 1 y 59 años. La dosis, para que haga efecto y genere anticuerpos, debe recibirse entre 10 y 15 días previos al desembarco en Brasil.

Es que la vacuna en cuestión no se coloca a todo viajero sino a quienes irán a las zonas con la presencia del mosquito Aedes aegypt -el mismo vector que provoca el dengue y el zika- y de un mosquito típico de las regiones selváticas que ataca a los monos -que no transmiten la enfermedad pero sí son hospederos del virus-, fuentes de transmisión de la fiebre amarilla.

“La vacuna se aplica de acuerdo al destino donde se viaja. Por eso, antes se les pregunta cuál será el lugar de permanencia, la duración del viaje y si van a establecerse en un estado o van a movilizarse. Si van al Noroeste de Brasil sí es conveniente. Si van por ejemplo a Florianópolis o Camboriú no es necesario y no se recomienda porque puede ocasionar contraindicaciones como un shock séptico”, aclaró.

Es por eso que quienes vacacionen en el estado de Río de Janeiro, incluida la ciudad de Río de Janeiro, San Pablo, Espíritu Santo y Bahía (con sus zonas altamente turísticas como Salvador, Ilheus, Porto Seguro, Itaparica y Mata de Sao Joao), sí deben vacunarse.

 

  • Para agendar

Se puede ir al vacunatorio del Hospital Rawson (en Avenida Rawson 494 sur) los jueves de 8 a 11, al Hospital Marcial Quiroga los martes y viernes de 8 a 11 y al vacunatorio Provincial (ubicado en Mitre 344 oeste) los días lunes y miércoles de 7 a 13. Fuera de esos horarios no se podrá ser vacunado. La vacuna es gratuita. Es conveniente consultar al médico antes de vacunarse.

 

 

  • No aplicar

Según indican desde Salud Pública, no es conveniente aplicar la vacuna en mayores de 60 años y en menores de 1 año. Tampoco pacientes inmunosuprimidos (es decir personas con tratamientos oncológicos, por HIV, transplatados e inmunosupresores, etc.), mujeres embarazadas o en lactancia materna, quienes padecen enfermedades neurológicas y de la glándula timo.

 

 

  • Aruba la exige

A diferencia de Brasil, en Aruba sí será obligatoria la vacuna contra la fiebre amarilla, pero desde el 1 de marzo de 2018. Todos los turistas argentinos que viajen a esta isla caribeña deberán presentar su Certificado Internacional de Vacunación, tal como lo estableció el Ministerio de Salud de Aruba. Se exigirá al momento del check in en la aerolínea o en la entrega de equipaje.