El escritor austríaco Peter Handke ganó el premio Nobel de Literatura 2019 y el pospuesto galardón de 2018 fue para la autora polaca Olga Tokarczuk, dijo ayer la Academia Sueca.
Este año se entregaron dos Nobel después de que el premio del año pasado fue pospuesto por un escándalo que llevó al marido de una integrante de la Academia a ser condenado por violación.
Desde entonces, la organización ha designado nuevos miembros y reformó algunas de sus más arcanas reglas tras una inusual intervención de su patrocinador real, el rey de Suecia.
Handke, de 76 años, recibió el premio de 2019 "por un trabajo influyente que con ingenio lingüístico ha explorado la periferia y la especificidad de la experiencia humana", indicó la Academia. El premio de 2018 fue para Tokarczuk "por una imaginación narrativa que con pasión enciclopédica representa el cruce de fronteras como una forma de vida". Solo dos de sus libros fueron traducidos al castellano y se la define como "la mejor representante del realismo mágico polaco".
Handke se estableció como uno de los escritores más influyentes de Europa después de la Segunda Guerra Mundial, señaló la Academia, con un cuerpo literario que contiene novelas, ensayos y obras dramáticas.
Tokarczuk, de 57 años, fue psicóloga antes de publicar su primera novela en 1993. Desde entonces, ha producido una constante y variada cantidad de obras. Su novela "Flight" ganó el prestigioso Man Booker International Prize el año pasado, convirtiéndose en la primera polaca en recibirlo. La autora ha generado controversia en su Polonia natal al tocar zonas oscuras del pasado del país que contrastan con la versión de la historia promovida por el partido nacionalista gobernante polaco, Ley y Justicia (PiS).