El vestido viral fue la madre de todas las batallas sobre colores. El mundo entero se dividió entre dos combinaciones de colores y nadie logró hacer cambiar a los del otro bando. La auténtica grieta.

 

Después, la discusión de los colores volvió en forma de ojotas, zapatillas y hasta uñas. ¿Faltaba algo? Sí, claro: un mueble.

 

 

 

Entre los comentarios que debaten sobre los verdaderos colores del mueble, uno señala la respuesta correcta: es el autor de la publicación que confirmó que la cómoda está pintada de gris y azul.