El filipino Manny Pacquiao retuvo el cinturón de los medio medianos de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB) al derrotar en forma unánime y nítida al retador estadounidense Adrien Broner, en la pelea central de la cartelera disputada en el hotel MGM Grand de la ciudad de Las Vegas.
El púgil asiático, de 40 años, no dejó dudas de la legitimidad de su éxito y dominó el combate, de principio a fin, sin pasar ningún sobresalto, al cabo de los 12 rounds. Dos de los jurados fallaron 116-112, mientras que el restante vio ganar al también senador en su país por un marcador 117-111. De este modo, Pacquiao, con más de 23 temporadas como profesional rentado y con una foja de servicios que incluyen 9 títulos mundiales en 8 categorías diferentes, elevó su récord a 61 triunfos (39 por la vía rápida), 7 derrotas y 2 empates. El filipino diseñó una muy buena labor, llevando siempre la iniciativa y buscando en forma incesante un nocaut que no llegó, pero que bien pudo haberse concretado en el noveno asalto, cuando el estadounidense se mostró tambaleante por una derecha que entró de lleno a su rostro. Así las cosas, Pacquiao, que venció al argentino Lucas Matthysse en julio pasado en Kuala Lumpur (KOT en el séptimo round), continúa alimentando la posibilidad de revancha con el invicto norteamericano Floyd Mayweather (50-0), quien lo superó en una recordada pelea celebrada en mayo de 2015, casualmente en ese mismo escenario.