En el primer día del regreso de las ventas presenciales, en el comercio sanjuanino la actividad en el centro de la ciudad fue como la de un sábado normal, con afluencia regular de clientes y con compradores que debieron esperar hasta ayer para adquirir los productos que necesitaban. Y con muchos que optaron por pagar las cuotas de planes adeudados. En los shoppings el panorama fue distinto porque el movimiento fue escaso. En el sector lo atribuyeron a que había confusión en la gente y a que, por la altura del mes, muchos todavía no han cobrado.
Tras el anuncio del viernes del gobernador Sergio Uñac, una de las actividades que volvió a activarse fue la reapertura de los comercios, en el centro de 10 a 18 y en los shoppings de 11 a 22. Pero el movimiento fue dispar, aunque celebrado por todos los que pudieron acercarse a los negocios.
Hugo Arabel, encargado del Dismar de peatonal Tucumán, dijo que pudo observar “el movimiento como un sábado normal dentro de la pandemia” y añadió que incluso pudo cerrar algunas ventas en el local, por ejemplo de un freezer, un lavarropas, un secarropas y un modular durante la mañana.
Carlos Iramain, dueño de tres locales comerciales de venta de ropa y de peluches, dijo que pudo cerrar algunas operaciones, la mayoría con tarjeta, y lo atribuyó a que “la gente guarda el efectivo que tiene por las dudas se vaya a complicar la pandemia”.
Desde una tradicional cadena de venta de calzado, como Vallejo Calzados, el supervisor de la región de Cuyo, Benito Arévalo, sostuvo que la mayoría de los clientes que concurrió fue a pagar a cuotas de planes adeudados. Tras dos semanas con las persianas bajas, muchos optaron por esperar hasta ayer para ponerse al día.
El panorama de muchos clientes haciendo cola en la zona de la peatonal, por ejemplo en Frávega, Falabella y Naldo, era porque querían regularizar los planes adeudados. Pero todo fue ordenado, con la gente manteniendo la distancia y con el uso obligatorio de tababocas.
Pero no todo era pagar planes, porque también la zona de la peatonal se pobló con gente que fue a realizar algunas compras. Como en el caso de Héctor Tobares, que había cumplido años y su familia le regaló dinero, que aprovechó para comprarse calzado y hasta su nieto de seis años también resultó beneficiado.
Según fuentes policiales, hasta las 13 de ayer unas 25.000 personas habían pasado por la peatonal sanjuanina.
Pero no ocurrió lo mismo en los shoppings, donde la presencia de compradores fue escasa. Alejandro Escobar, de Patio Alvear, dijo que como la habilitación fue dada recién el viernes, había mucha confusión en la gente. Y lo atribuyó a que algunos creían que se iba a diferencia por el DNI o que no se iba a permitir la presencia de mayores de 60 años. Una de las decisiones del sector gastronómico fue ocupar con mesas la zona del estacionamiento.
Andrés Marún, center manager del Paseo Libertad San Juan, dio a conocer que hubo poco movimiento durante la mañana, aunque se pudieron cerrar algunas operaciones. Su expectativa era que la actividad se empiece a normalizar en los próximos días, porque servirá para el sostenimiento de unos 130 locales comerciales. Lo que no estaba funcionando era el patio de comidas, que está dentro del recinto cerrado.
- Poca gente en la zona de Rawson
El panorama en la otra zona de concentración comercial de la provincia, como es Rawson, fue de una escasa afluencia de compradores, a diferencia de lo que ocurrió en la Capital, según testificaron comerciantes del departamento. Víctor Alvarez, de Ito Nuel, habló de una escasa afluencia de compradores. Y con él coincidió Maximiliano García, de Emilia Modas. El comerciante, dueño de un negocio dedicado a la venta de indumentaria, lo atribuyó, en parte, al temor de la gente a los contagios. En el caso de Emma Sánchez, propietaria de Emma Closet, un negocio dedicado a la comercialización de ropa de niños y damas, consideró que todavía muchas personas no habían cobrado sus sueldos, con la excepción de los empleados de la administración pública, tanto provincial como municipal.