La urgencia era ganar. Como sea, como fuera. Necesita este Peñarol dar señales de vida en este Federal A y después de 46 días, volvió a ganar. Después de casi una rueda completa, el Bohemio demostró que está vivo, que todavía no se entregó y con goles de Pablo Costi, de penal, y otro de Claudio López, ganó su segundo partido de la temporada venciendo por 2-0 a Juventud Unida Universitario de San Luis en el estadio del Bicentenario. No le sobra nada a este Peñarol, pero el refresco mental que consiguió darle Fernando Montenegro, tuvo mucho que ver para que el Bohemio pudiera cortar la amarga serie negativa. Más entrega, otra actitud y algunos retoques mínimos desde lo táctico, le alcanzaron para terminar festejando en la fría tarde del sábado una victoria que todos querían en Chimbas. Un acierto más fue la decisión de llevar el juego al Bicentenario, con otro piso, le terminó entregando un plus para que varios pudieran jugar algo más.
En la próxima, Peñarol visitará a San Martín de Mendoza que ayer fue goleado 3-0 por Bolívar.
El partido mostró la intención permanente de Peñarol de ser protagonista. Con sus limitaciones a cuestas, el Bohemio siempre buscó. Fue por más y el trabajo de Alderete más Javier Gil Casares y Matías Ruiz Sosa le permitieron tener la iniciativa casi siempre. No tuvo toda la profundidad que se necesitaba pero Peñarol fue y lo buscó. Recién en el final del primer tiempo tendría premio con el penal que Pablo Costi cambió por gol para poner al de Chimbas arriba. En el complemento, todo fue demasiado parejo. Peñarol se replegó buscando la contra que liquidara todo y Juventud fue a buscarlo. Peñarol lo liquidó con el segundo gol de Claudio López. Por fin se le daba a Peñarol. La última victoria había sido el 23 de abril pasado, cuando goleó a San Martín de Mendoza. Muy lejos en el tiempo. Hoy, necesitaba dar señales de vida y por fin lo consiguió.