Un joven quedó ayer al borde de una de las situaciones más complicadas de su vida desde que, el pasado 4 de febrero, fue denunciado por haber violado a una chica de 15 años, la noche del 25 de diciembre pasado en el camping El Paraíso, en Pocito. El fiscal Duilio Ejarque y el ayudante fiscal Benjamín Spatzer, le pidieron al juez de Garantías Andrés Abelín Cottonaro, que condene a ese joven (Andrés Hernán Acosta Páez, 25 años) a 10 años de cárcel por el ataque sexual ocurrido en los baños de esa entidad y por desobediencia a una orden judicial, pues días después de la denuncia, algunos de sus parientes y otros sujetos fueron hasta la casa donde había mudado la familia de la menor, para amenazarlos.
La defensora María Noriega pidió la absolución, pues consideró que no fue su cliente sino otro joven el que atacó a la chica, a la que testigos a favor del imputado intentaron desprestigiar.
Un dato no menor a evaluar por el juez es que a pesar de que la víctima habló de un gran dolor y haber sido violada (se encerró durante un mes en su casa y temía estar embarazada), el médico que la revisó informó que aún estaba virgen.