El principal problema de la piel cuando se vuelve de las vacaciones es la deshidratación y la sequedad. La piel deshidratada es aquella que pierde agua de forma excesiva, y la piel seca tiene menor cantidad de lípidos (debido a esto, también pierde agua).  

Ambas afecciones aparecen juntas cuando se terminan los días de ocio, y contrariamente a lo que se cree no sólo sucede en pieles normales o secas, puede ocurrir en cualquier tipo de piel (grasa, mixta o seca). 

El nivel de humedad, las temperaturas extremas (tanto altas como bajas), el viento, el sol, la radiación UV, son responsables de la deshidratación de la piel. Todos son factores que favorecen la evaporación de agua y por tanto una piel deshidratada. 

El contacto prolongado o repetido con agua, debido a una higiene excesiva o a los baños sobre todo en piscinas con cloro o agua salina puede generar deshidratación dérmica. 

El uso de jabones no adaptados a las condiciones fisiológicas de la piel o de elementos abrasivos (exfoliantes agresivos), algunos medicamentos (retinoides, corticoesteroides) o el padecimiento de alguna dermatosis como eczema, pueden ser también una causa. 

 

Los síntomas de la deshidratación son: 
 
-Falta de suavidad y elasticidad. 

-Falta de luminosidad (piel opaca y sin brillo). 

-Falta de confort, piel tirante, rugosa y a veces descamada.  

-Aparición de "arrugas de deshidratación’, sobre todo en los pómulos y el contorno de ojos. 
 
 
 
Trucos para rehidratar la piel
 
Para tratar la piel deshidratada y evitar que los síntomas se agraven, es importante seguir una rutina adecuada, que habitualmente deja de practicarse durante el verano, tanto durante el mismo como a la vuelta: 

 
-Eliminar el maquillaje suavemente para evitar que la piel se vuelva aún más frágil. 

 
-Aplicar una loción, gel o crema hidratante todos los días, para mantener un nivel adecuado de hidratación y restablecer la función barrera de la capa córnea (encargada de proteger la piel).  

 
-La radiación solar también deshidrata la piel, por lo que la hidratante de la mañana debe tener protector solar. Otra opción es colocarse el producto hidratante y a continuación, un protector solar. Esto debe respetarse durante todo el año. 

 
-Hay que elegir una textura adecuada para el tipo de piel, la estación del año y el clima en el que se vive. Ante la duda, lo mejor es consultar con un dermatólogo. 

Lo ideal es que las cremas que se utilicen después del verano tengan alguna sustancia exfoliante que ayude a desprender las células muertas de la capa más superficial de la piel, que por acción del sol son más numerosas en esa época. 
 
 
 
Letras chicas 
 
Al comprar un producto hidratante es fundamental leer las letras pequeñas, donde detalla los ingredientes con los que el producto está realizado.  

Para que realmente resulte útil y ayude a la piel a restaurar su equilibro, la crema, loción, etcétera, debe combinar cuatro tipos de ingredientes activos. Esto aplica a los productos de cuidado y de limpieza. 

1-Sustancias de acción higroscópica: Retienen el agua presente en una emulsión de una forma más duradera y válida. Las sustancias mas usadas para esto son la glicerina, el sorbitol y el propilenglicol. 

2-Sustancias de interacción química: Favorecen la unión del agua a las proteínas de la membrana celular, y son capaces de retener el agua dentro de las células del estrato córneo (la capa mas superficial de la piel). Son la urea y los alfahidroxiácidos, sobre todo el ácido láctico. 

 
3-Sustancias oclusivas:  Impiden la evaporación del agua. La vaselina, lanolina, escualeno, cera de abeja, etcétera. 
 

4-Sustancias activas hidratantes: Colágeno, ácido hialurónico, ceramidas, vitaminas (B, A, carotenos, E, C, H y D). 
 
 
Con respecto a la hidratación facial existen dos fórmulas básicas:

 
1-Las emulsiones de aceite en agua: Se utilizan para las hidratantes de día más ligeras. Suelen estar compuestas por aceites minerales, propilenglicol y agua. 

 
2-Las emulsiones de agua en aceite: Para las cremas de uso nocturno o "reestructurantes’ faciales. Algunas marcas las llaman "cremas nutritivas’. Se componen de aceites minerales, alcohol de lanolina, vaselina y agua. 
 
 
Las cremas para el contorno de ojos son cremas nocturnas a las que se elimina alguno de los productos que pueden ser más irritantes. 

 

 
Las manchas, efecto secundario directo 

Al terminar el verano, algunas pieles presentan algunas manchas oscuras. En estos casos es aconsejable utilizar geles o cremas despigmentantes con sustancias como la hidroquinona, la arbutina o el ácido kójico. Las cremas con vitamina C, también iluminan más la piel. 

 
 
Fuente: Rosa Ortega del Olmo, dermatóloga / Doctors & Labs