Señor director:

En San Juan, como en el resto del país, la ciudadanía clama desde hace ya hace varios años, por la eliminación de la pirotecnia. Pero, la mayoría de los funcionarios hace oídos sordos a estos reclamos. Varios son los motivos por los cuales la gente no quiere esta mercadería. Una de ellas es porque las explosiones que producen le hacen daño a un gran segmento de la comunidad, como son los bebés, niños, adultos mayores y personas enfermas. También hacen mucho daño a los animales, que en algunos casos como los perros, su sentido del oído es muy sensible y desarrollado, por lo que los lastima. Y, además, la manipulación de estos elementos con pólvora suelen causar heridas muy dañinas en la vista y en el cuerpo en general, por causa de las quemaduras.

Sería correcto que se hiciera, como en muchos países del mundo, un espectáculo pirotécnico manipulado por profesionales, en un lugar determinado que no haga daño y que sea de acceso público. De esta manera, evitaríamos muchos problemas.