Claudio Javier Poggi, quien el 10 de julio cumplirá 60 años, será el nuevo gobernador e hizo historia. El peronismo perdió un territorio que dominaba desde 1983 tras el retorno de la democracia a la Argentina: una alianza multisectorial con predominio de los partidos afines a Juntos por el Cambio, especialmente el PRO y la UCR, logró derrotarlos en las urnas.
Aunque los primeros guarismos fueron adversos y le daban una ventaja tempranera a su principal adversario, el oficialista Jorge “Gato” Fernández, la tendencia se fue revirtiendo lentamente. Ya con el 14% de los votos escrutados, a las 22.30, empezó a apreciarse que la victoria estaba más cerca. Terminó de confirmarse con la visita breve y el abrazo de “el Adolfo”, el Rodríguez Saá que lo impulsó a la gobernación.
Es que la elección se presentaba muy difícil para Poggi y su tropa en el contexto de una tierra que se había acostumbrado al dominio de una dinastía que parecía invencible. Primero había sido Adolfo, el hermano mayor de los Rodríguez Saá, el que ejerció cinco mandatos provinciales hasta 2001, cuando en plena crisis tras la renuncia de Fernando de la Rúa, fue designado como presidente de la Nación. Lo sucedió la vicegobernador María Alicia Lemme hasta que arribó al poder Alberto Rodríguez Saá, el hermano dos años menor, quien cumplió cuatro mandatos.
Entre diciembre de 2011 y diciembre de 2015, Poggi accedió al máximo cargo de la provincia cuyana, porque Alberto lo eligió como su momentáneo heredero. Pero luego en 2015 le impidieron reelegir y hubo ruptura. Poggi fue electo diputado nacional por San Luis, obteniendo el 63.5% de las preferencias del electorado, se convirtió en el candidato más votado de todas las categorías que competían en aquellos comicios. En 2016, fundó el partido Avanzar San Luis. Desde ese espacio compitió y accedió al cargo de senador nacional al año siguiente sumándose al interbloque de Juntos por el Cambio. En 2021, encabezó la lista de diputados nacionales que le ganó al oficialismo provincial. Con el 46.10% de los votos, Poggi en representación de Unidos por San Luis, ingresó a la cámara baja nacional.
Este contador público que se recibió en la Universidad Nacional de Río Cuarto, está casado con Sandra, la madre de sus dos hijos. A mediados de los años 80 se radicó en San Luis, atraído como miles de argentinos por la promoción industrial que vivía la provincia. Cumplió funciones en diferentes roles del Poder Ejecutivo y legislativo provincial y en ambas cámaras legislativas nacionales. Ahora cumplirá su gran sueño, el que venía persiguiendo desde hace rato.