La barra brava de Boca, con Rafael Di Zeo a la cabeza, recibió a diez pares rusos en un restaurant por la zona del Abasto para arreglar la logística de cara al Mundial que se avecina.

 

Abordaron temas como el alojamiento, el transporte y los abogados y se estima que alrededor de 280 barras, de los cuales 90 serán de “La 12”, viajen a la cita mundialista con entradas en la mano.

 

El contacto llegó a través del hermano de “Mochila”, uno de los laderos de Di Zeo, que es tatuador y trabaja en la galería Bond Street. ¿El nexo? Resulta que los rusos tienen un particular fanatismo por los tattoo y eso facilitó el encuentro.

 

Los invitados llegaron el 31 de enero en un vuelo vía Frankfurt, se instalaron en Buenos Aires, y extendieron sus negocios por Nueva Chicago, San Lorenzo y Vélez, pero fueron descubiertos por el programa “Tribuna Segura” cuando intentaron ingresar a La Bombonera con carnets truchos y se ganaron una causa judicial.