En referencia al grave problema ocasionado al arbolado público de la peatonal Domingo Faustino Sarmiento me permito expresar lo siguiente:
En primera medida debemos considerar al arbolado público como un bien patrimonial y por ende ser tratado como tal, esto es haber realizado todas las consultas pertinentes establecidas por leyes provinciales.
Si bien las obras públicas están eximidas de la ley de impacto ambiental por la desgraciada norma que vetó este artículo en el año 2015 no es menor que existe un organismo rector: Dirección de Arbolado Público que a nuestro entender, debió ser consultado.
Que a sabiendas la erradicación de árboles se produce en un feriado largo (19 de agosto) para no causar la reprobación social, cosa que no pudieron evitar, pues el mismo día domingo estuvimos ahí, junto a otros grupos, solicitando una justificación.
Una vez producida la tala, el Consejo de Arbolado Público, del cual somos miembros, convoca a reunión extraordinaria, (22 de agosto 2018) en la sede municipal para escuchar los argumentos de la empresa responsable de la obra, en cuya reunión admiten el error de no haber considerado los árboles existentes, provocando en ellos, daños irreparables que llevarían a la erradicación de los forestales.
Con este justificativo talan todos los plátanos de calle Rivadavia. A partir de este calamitoso hecho, el periodismo y la sociedad, los benefactores y las sociedades protectoras del patrimonio, los comerciantes, sus empleados y el ciudadano común, han comentado o bien criticado la medida, por el desolado aspecto que muestra ahora este paseo público.
Por otra parte y fruto de sucesivas reuniones, se obtuvo la opinión de expertos en la materia, que sugería la reposición de árboles en calle Rivadavia debía ser la misma especie de árbol, o sea el plátano, esto está expresado en los informes que obran en expediente. Sorpresivamente esta semana se anuncia que la nueva especie a implantar es el ibirapitá, desoyendo todo consejo, lo que deja en claro la soberbia con la que actúan los funcionarios municipales, si bien es una especie nativa, proviene de la Región del Chaco, no garantiza su normal desarrollo en un clima más hostil, una prueba de dos años no es suficiente para determinar que se adapta, en consecuencia habremos perdido ciento cincuenta mil pesos y empezar de nuevo.
El plátano siendo una especie exótica ha dado buenos resultados en toda la región de cuyo, además se ha desmitificado su fama de causante de alergias, constituyendo un bello ejemplar de nuestras calles y paseos.
Mucho mejor sería que los gobernantes escuchen el clamor de su pueblo, a ellos se deben y la felicidad y el bienestar reinarían.
Por Raúl Bustamante – Presidente del Eco Club San Juan.