Frente a la incesante pérdida de reservas y las crecientes dificultades para garantizar el abastecimiento de energía en invierno, el Banco Central dispuso restringir aún más el pago de importaciones mediante una serie de medidas que se calcula que impactarán en el comercio exterior y que ya ocasionaron una disparada del dólar blue y que han puesto en alerta a la industria y al sector exportador en la provincia.

Desde la Cámara Minera, su presidente, Mario Hernández, sostuvo que "creo que hay que esperar un tiempo para ver si se pone más lento el proceso de importaciones o no". Y advirtió que "hay que tener en cuenta que para producir y exportar, la minería necesita importar". Por ejemplo maquinaria y repuestos para sostener los procesos productivos.

Desde Josemaría, el proyecto de cobre, oro y plata más próximo en empezar a construirse se abstuvieron de opinar sobre los efectos de las medidas, al igual que desde Veladero, una mina que está en marcha desde hace más de 15 años.

"No soy pesimista, pero habrá que ver qué pasa en el futuro con las inversiones en el sector", dijo Hernández.

El temor es que un mayor control de las importaciones pueda limitar la expansión del mercado interno vía menor disponibilidad de insumos y bienes, tanto en cantidad como en variedad, afectando la actividad industrial presionando sobre los precios o postergando la decisión de compra de los consumidores.

En ese sentido, Antonio Giménez, desde la Cámara de Comercio Exterior, expresó que "ya hay síntomas de restricción, por ejemplo Argentina no produce caucho para fabricar neumáticos" Y habló de un "problema más, que puede llegar a impactar en el acceso de bienes de capital, pero que además genera incertidumbre en los mercados del exterior, como se ve con el riego país. Todos los sectores tienen insumos que se compran en el exterior, ninguno puede escapar y por eso entendemos que se trata de medidas que no tienen lógica en el comercio internacional".

Desde la Unión Industrial de San Juan, Gustavo Fernández mencionó que "lo más grave del impacto de las medidas es por la restricción a la importación de bienes de capital, maquinarias y repuestos". Y agregó que "el acceso a los insumos importados es clave para que el proceso productivo no se detenga".

Hay que mencionar que entre las medidas adoptadas se extiende el sistema de financiación de importaciones a las realizadas bajo Licencia No Automática y a la importación de servicios, que tendrán vigencia por un trimestre, para dar tiempo a la normalización del comercio exterior.

Además, las pequeñas y medianas empresas quedan exceptuadas de las exigencias vigentes de financiar sus importaciones por un incremento de 15% respecto al año anterior, con un límite de hasta un millón de pesos.

Fabián Rodríguez, titular del Consejo Profesional de Ciencias Económicas de San Juan, habló de "las dificultades de las empresas como las de San Juan, que pertenecen a las economías regionales, y que no son parte de los grandes grupos multinacionales. Y por eso no podrán acceder a créditos internacionales para financiar las importaciones". El directivo también mencionó que "estamos viviendo una situación compleja y este tipo de medidas serán difíciles de sostener en el tiempo y también de ejecutar en la práctica".

Como asesores de empresas, Rodríguez explicó que entre los consejos a las empresas aparecen la necesitar de stockearse de mercadería, mientras puedan, y de racionalizar el uso de la maquinaria frente a la posibilidad de que les cueste arreglar los equipos y conseguir repuestos.

Otro de los sectores de la economía provincial en el que hay preocupación es en el ámbito vitivinícola, por ejemplo para acceder a algunos insumos, como los tapones para botellas y repuestos para las líneas de envasado.

Cabe señalar que en junio, que está a punto de terminar, habrá récord absoluto en la cantidad de importaciones. Es porque las cuentas provisorias del Gobierno nacional dan que llegaron a, por lo menos, U$S9.000 millones. Un nivel nunca visto en un solo mes. Y que se da justo en el momento que la Argentina necesita imperiosamente juntar dólares para evitar una nueva crisis cambiaria.

De acuerdo con las estimaciones oficiales, de los U$S9.000 millones de importaciones, alrededor de U$S2.000 millones se fueron en compras de energía, como el gas.

 

Un planteo desde la UIA nacional

La Unión Industrial Argentina (UIA) reclamó al Banco Central la conformación de una mesa de trabajo para evitar que la ampliación del cepo cambiario "evite complicaciones en las cadenas de valor", con paradas de fábricas por falta de insumos. Fue tras una reunión, entre el titular de la central fabril, Daniel Funes de Rioja, y el titular del BCRA, Miguel Pesce.

"Durante el encuentro se abordó el alcance de las nuevas medidas regulatorias del mercado de cambio y su impacto en el acceso a insumos importados indispensables para la producción", dijo la UIA en un comunicado.

Funes de Rioja le pidió a Pesce conformar una mesa de trabajo "que permita la continuidad del proceso productivo". Buscan "evitar complicaciones en las cadenas de valor y garantizar el abastecimiento del mercado interno".