Frente al planteo de la Federación de Viñateros, que le pidió a la Secretaría de Comercio Interior de la Nación que intervenga para evitar que las mosteras abusen de la llamada situación dominante, que les permite pagar bajos precios por la uva y no actualizarlos a pesar de la fuerte devaluación de la moneda, los gobiernos de San Juan y Mendoza analizan sumarse. "Hemos hablado con el ministro de Economía de Mendoza, Martín Kerchner, y le hemos dicho que estamos dispuestos a acompañar lo que puedan presentar", dijo ayer el ministro de la Producción, Andrés Díaz Cano.
La semana pasada, la Federación de Viñateros de San Juan, que preside Eduardo Garcés, presentó una denuncia en el área de Comercio Interior de la Nación, por abuso de situación dominante de las mosteras. En otras palabras, en la entidad entienden que las elaboradoras de jugo de uva se ponen de acuerdo para pagar precios muy bajos por el kilo de uva y que encima abonan en muchas cuotas, sin que haya una actualización, por ejemplo tras la fuerte devaluación del peso.
De prosperar el pedido, que tiene todavía un largo camino por recorrer (ver aparte), el organismo nacional tiene facultades para intervenir en el mercado del mosto y obligar a las mosteras a que mejoren los precios y las condiciones de comercialización. Si los empresarios se resistieran, las actuaciones pueden pasar a la justicia ordinaria, que puede disponer de multas de hasta 5 millones de dólares, según la gravedad de la infracción, o la clausura de los establecimientos elaboradores hasta por 30 días.
Luego de la presentación de la entidad sanjuanina, el mendocino Kerchner estuvo reunido con funcionarios del área de Comercio Interior "para analizar la posible intervención", según incluso tuiteó el propio ministro. En San Juan, el ministro Díaz Cano dijo que "apoyamos la presentación que se ha hecho", por la de la federación, y agregó sobre una nueva presentación que "si el Gobierno de Mendoza quiere que los acompañemos lo vamos a hacer".
El argumento de los viñateros sanjuaninos es que las mosteras, en la vendimia 2018, con un dólar a entre 20 a 21 pesos, pagaron al productor 4,50 pesos por el kilo de uva, cuando exportaban la tonelada del jugo de uva a 1.343 dólares. En el 2019, sin que el precio de exportación haya caído sensiblemente, con un dólar en promedio, antes de la devaluación, a 45 pesos, están pagando el kilo de uva a 3,50 pesos y en planes, que pueden llegar entre 3, 6 y hasta 8 cuotas. Incluso una de las empresas más importantes del sector cerró operaciones pagaderas hasta en 12 cuotas. Como si fuera poco, tras el lunes negro por el resultado electoral de la PASO, el dólar siguió subiendo y, por ejemplo, ayer cerró a 57,20 pesos. Pero ni aun así las mosteras se han mostrado dispuestas a mejorar los planes de pago a los productores.
"Los hechos determinan que las empresas productoras-exportadoras de zumo de uva ejercen una clara posición de dominio sobre el mercado de uva destinada como materia prima para la producción de mostos", dicen los viñateros en la presentación. Y que como consecuencia de esa posición obtienen "una exorbitante rentabilidad basada en el perjuicio del interés económico general de los productores de la materia prima; ergo de los productores vitivinícolas asociados a la federación", agregan en el escrito.
Frente al planteo, el presidente de la Cámara Argentina de Exportadores de Mosto, Fernando Morales, rechazó los términos de la presentación. "En el 2018, 37 compañías operaron en el país y frente a ese número es difícil moverse en forma cartelizada". Y agregó que en la actualidad el valor de la tonelada se comercializa a 1.084 dólares y no a los valores que citan los viñateros. "Más allá de la devaluación, tenemos que afrontar el pago de retenciones y nuestros insumos también han subido, por ejemplo la energía", sostuvo. Sobre los términos del planteo señaló que "se trata de una idea falsa que carece de rigor".
Valor
3,50 Es, en pesos, el valor promedio que les han pagado las mosteras al productor por el kilo de uva. El año pasado fueron 4,50 pesos, con un dólar mucho más bajo que ahora.
Los plazos de la demanda
Tras la presentación de los viñateros, la Secretaría de Comercio Interior del Ministerio de Producción y Trabajo de la Nación deberá evaluar si hay razones suficientes para aceptarla o rechazarla. Puede rechazarla y pedirle a la Federación de Viñateros que la mejore. Para tomar esa decisión tiene un plazo de 10 hábiles para analizar los términos del planteo. Los viñateros también tendrán otros 10 días hábiles para agregar más elementos de prueba que justifiquen el pedido. Si el organismo nacional la acepta, le correrán vista a los denunciados, en este caso a las mosteras, que tendrán su plazo para contestar la demanda y justificar su comportamiento. Si no satisface la respuesta, la secretaría nacional puede intervenir en el mercado para lograr que se paguen mejores precios a los productores y en mejores condiciones, por ejemplo con actualización de los montos.