Los jefes de los bloques que conforman el Senado y las autoridades de la Cámara Alta definieron ayer no avanzar de inmediato con el pedido de desafuero de la senadora y expresidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner.

 

En la reunión de Labor Parlamentaria se definió que el período de 180 días es de días hábiles y que el plazo corre desde el 21 de marzo, por lo que esa discusión se aplazó hasta noviembre. El oficialismo había convocado a los representantes de todos los grupos parlamentarios a una reunión de Labor Parlamentaria para resolver el modo de cómputo de días previsto para el tratamiento de la solicitud judicial, ya que se dudaba si el plazo establecido en la Ley de Fueros (180 días desde que el juez hace la solicitud) debía contabilizarse como días hábiles o naturales.

 

Finalmente, los representantes de los bloques políticos en la Cámara Alta se pusieron de acuerdo en que ese plazo corre desde el 21 de Marzo, que fue cuando se constituyó la Comisión de Asuntos Constitucionales -que es la que corresponde iniciar el debate del desafuero-, y que hasta ahora no debatió todavía sobre el asunto.

 

Hace seis meses, el juez Claudio Bonadio dictó el procesamiento y la prisión preventiva (que no puede hacerse efectiva por su condición de senadora) de la exmandataria, al considerar que el memorándum que Argentina firmó con Irán en 2013 para juzgar de manera conjunta el atentado a la mutua judía AMIA de Buenos Aires en 1994 tenía como finalidad proteger a los sospechosos de ese país.

 

Bonadio pidió entonces que el Senado despoje de sus fueros a la exmandataria, algo sobre lo que no ha habido avances desde entonces. El pedido tomó estado parlamentario durante la sesión del 27 de diciembre, la última de 2017, y, desde entonces, comenzaron a correr los plazos.