1. Evitar colores oscuros: el verano no es la mejor época del año para llevar prendas oscuras como el nego o azul marino. Es una realidad que el negro atrae el calor, "pero es un gran aliado a la hora de disimular imperfecciones", de esta manera, Pica sugirió reemplazarlo por -tonalidades – como ciruela o verde militar -para las que no se atreven a los off white, crudo o pasteles que son el hit de la temporada.
2. No al poliéster: la fibra sintética muy resistente tiende estar presente en prendas de uso diarios como blusas, faladas y pantalones. Sin embargo, sus propiedades hacen que suelan retener la humedad restringiendo el flujo de aire. "La tela se sienta pesada, que se pegue a la piel, generando una sensación desagradable", detalló Pica.
3. Obviar las piezas ajustadas: más que nunca inclinarse por piezas oversize muy holgadad. Además de ser sofisticadas permiten que la piel respire frente a la posible sudoración.
4. Reemplazar los géneros pesados: parece obvio pero no siempre se eligen las prendas adecuadas, las texturas livianas son el algodón, lino o la seda. Según Pica, son texturas elegantes para enfrentar con estilo el calor. SE puede encontrar en vestidos, pantalones, camisas o os famosos pijamas de moda outwear.
5. Menos accesorios: collares xxl, joyas de autor, anillos de sello algunas de las piezas que se imponen en esta temporada. Pero para los días de humedad elevada "las manos se tiene a hinchar y lo mejor es despojarse de estos elementos", detalló la especialista. Propone reemplazar por aros pequeños o lucir un simple reloj.
6. Calzado cerrado: es importante que presenten algún tipo de ventilación para que el pie se mantega fresco. De no ser así optar por el uso de medias de algodón.
7. Cuidado con los sombreros: para la playa son ideales porque bridan protección frente a la exposición solar, para trasladarse por la ciudad pueden convertirse en enemigos. "Optar por los de estilo Panamá que son ligeros y muy glamorosos", sugirió Pica.