Casi a diario se conocen aberrantes casos de abusos sexuales donde los blancos de estos chacales son niños y niñas. Lo más preocupante, muchos de ellos son en el ambiente familiar, es decir, el violador convive con la víctima.

Este lunes por la mañana, hubo un juicio abreviado donde la defensa del imputado por abuso aceptó 10 años de prisión. El abogado Alejandro Castán y el fiscal  Daniel Galvani, pactaron esa pena, aunque será el juez Maximiliano Blejman -Sala II de la Cámara Penal- quien hará una valoración.

El caso es gravísimo. La causa reveló que un sujeto de 37 años primero manoseó y luego violó a su hijastra en un domicilio de Pocito cuando la menor tenía entre 7 y 12 años. El adulto se aprovechaba de la ausencia de la madre para cometer los ataques sexuales.

Los abusos recién se detuvieron en marzo de 2020 cuando se radicó la denuncia.