De terror. El juego "Discovery" se detuvo repentinamente, quedando atrapadas 31 personas, boca abajo. Bomberos debieron ir a socorrerlas en un operativo que duró más de 5 horas.

 

El dueño de "Hollywood Park", Alfredo Rodríguez Siuffi, fue procesado por lesiones culposas por la noche de terror que vivieron 31 personas el pasado 4 de mayo, cuando quedaron atrapadas boca abajo a más de 15 metros de altura en uno de los juegos electromecánicos del parque de diversiones, aunque no irá preso ya que la pena -si es encontrado culpable- va de 1 mes a 3 años, además que tampoco deberá cumplir prisión preventiva.

El juez interino del Primero Correccional, Juan Pablo Ortega, se basó en la pericia que realizó personal de la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional de San Juan en el juego, denominado "Discovery", que encontró "una falta total de mantenimiento y controles", para definir que Rodríguez Siuffi estaba centrado solamente en lucrar y no realizaba mínimas inversiones que se tradujera en seguridad para las personas.

De a uno. Las personas eran asistidas con sogas para descender los más de 15 metros hasta pisar suelo firme.

El empresario deberá notificarse de la decisión del juez Ortega y luego con su defensa analizará si apela o no a la Cámara.

La investigación que realizó la Facultad de Ingeniería llegó a conclusiones que evidenciaban un claro desinterés en el mantenimiento de este juego, que repentinamente dejó de funcionar y que podría haber acarreado consecuencias realmente más graves, al punto de haberse traducido en una verdadera tragedia. Entre los párrafos más importantes, por ejemplo, aseguraron: "Se desprende de los diferentes análisis que las fallas en las piezas de esta máquina poseen un conjunto complejo y diverso de causas y efectos que se han ido potenciando y acumulando por la falta de control y mantenimiento de la misma", aseguró para luego advertir: "Si la falla o colapso de los dientes se hubiera provocado en uno de los últimos engranajes que engrana con la corona del eje horizontal, el brazo hubiese quedado libre y hubiese sido más peligroso para los pasajeros que estaban en la máquina".

Alivio. De los socorridos, tres personas sufrieron lesiones leves, por lo que fue procesado Alfredo Rodríguez Siuffi.

El dueño del parque afronta en la justicia penal una posible condena que no se traducirá con prisión, ya que la pena máxima es de 3 años. Pero es posible que en lo Civil se abran otros frentes, ya que se realizaron más de 20 denuncias por lo sucedido.

Antecedente
 

El juez Ortega se basó en el caso de Rodrigo Sánchez, quien falleció por intoxicarse mientras trabajaba en la obra de cloaca en General Acha y Progreso, en febrero de 2016. Fueron procesados el dueño y el capataz de la empresa.