Los docentes de los programas socioeducativos Centro de Actividades Juveniles (CAJ), Centro de Actividades Infantiles (CAI) y La Escuela sale del aula (ESA), viven momentos de incertidumbre desde hace meses porque no perciben sus salarios. Es más, hay casos que desde abril no ven un solo centavo.
Ante esta situación, muchos de los talleristas se cansaron y dejaron de brindar clases, pero otros prefirieron continuar desempeñando su vocación. Así es el caso de Érika Ávila, quien empezó en abril y nunca cobró nada. “El sueldo no llega a $1500 y nunca me depositaron. Sin embargo, yo sigo yendo porque me motivan las ganas de los chicos”, contó.
Érika es la responsable del taller de Comunicación y Nuevas Tecnologías en el Colegio Superior Nª1 de Rawson y tiene a unos 30 alumnos a su cargo. Sus clases son los sábados por un lapso de 2 horas y media y ya aseguró que no va a dejar de enseñar a pesar de la difícil situación.
El Gobierno provincial realizó gestiones ante Nación para que efectúe las transferencias correspondientes, sin embargo el depósito no apareció y la Provincia tampoco puede hacerse cargo. Los docentes damnificados son cerca de 400, de los cuales algunos decidieron parar y otros eligieron continuar focalizándose en el futuro de los chicos.
