La campaña para la elección de tres diputados nacionales será inédita debido a la pandemia del coronavirus, en la que los precandidatos de los frentes electorales apuntarán a moverse en grupos reducidos para evitar grandes concentraciones. Además, los organizadores de las cuatro alianzas que competirán en las PASO del 12 de septiembre echarán mano a las redes sociales y contactos con los medios de comunicación para llegar a un electorado que, en su mayoría, está jaqueado por la crisis económica y social.
En el Frente Todos explicaron que la idea es "desdoblar la lista", es decir, que tres postulantes, entre titulares y suplentes, acudan a un departamento para que los tres restantes lo hagan en otro de manera simultánea, con el fin de cubrir toda la provincia hasta la veda electoral. La coalición cuenta con el peso del gobernador Sergio Uñac, quien había asegurado que se pondrá la campaña al hombro y caminará con los candidatos. Fuentes de la organización dijeron que se coordinará y consensuará con los intendentes (peronistas y bloquistas), los presidentes de Junta y dirigentes de los partidos socios para el trabajo en conjunto. "Serán grupos muy reducidos para cumplir los protocolos y evitar aglomeraciones", destacaron, por lo que no habrá asesores ni funcionarios que estén de más en las recorridas. En el esquema, los jefes comunales también serán claves a la hora del contacto con el vecino y la inauguración de obras para conseguir el apoyo de los votantes.
Por su parte, Marcelo Orrego, líder de Juntos por el Cambio, destacó que "va a haber contacto con la gente, pero va a ser mucho más distante, en el que trataremos de tener todos los recaudos". El diputado nacional también indicó que va a acompañar en la campaña, en sintonía con la estrategia oficialista de tratar de trasladar su caudal de votos a sus postulantes. Además, expresó que todo indica que los aspirantes a la Cámara baja se van a dividir la agenda entre ellos "por una cuestión de tiempo y para llegar a todos los departamentos". Por el lado de Consenso Ischigualasto, Marcelo Arancibia, candidato en primer término, explicó que harán reuniones chicas, con grupos reducidos, y "hacer un trabajo territorial selectivo, además de reuniones con representantes de instituciones". En cuanto al Frente de Izquierda, en el que habrá internas, desde el partido Nueva Izquierda empezaron con actividades "al aire libre", con gazebos en el Parque de Mayo y mesas en la Terminal para el reparto de folletos bajo protocolo, dijo Cristian Jurado, postulante en el primer lugar.
OPINIÓN
La agenda de la campaña electoral que empieza
POR Maximiliano Aguiar – Consultor
A los ciudadanos, las elecciones les quedan lejos: las preocupaciones actuales están más ligadas a lo cotidiano, exacerbado esto por la situación de pandemia, tal como han mostrado las elecciones celebradas en los últimos meses en diversos países de Latinoamérica.
La agenda de las elecciones probablemente pivote alrededor de tres ejes temáticos.
1 – El Eje de Lucha contra la Pandemia: la evaluación de las políticas sanitarias y su éxito.
2 – El Eje Económico: traducido en la percepción de crecimiento económico, la mirada sobre la inflación, precio del dólar, etc.
3 – El Eje Social: relacionado con el empleo, la lucha contra la pobreza, seguridad, políticas educativas, entre otras.
Seguramente surjan otros temas de debate, pero los aquí planteados son los que hoy generan mayor interés ciudadano en todo el país.
Esta agenda se desarrollará, además, relacionada con la imagen de gestión en tres niveles: nacional, provincial y departamental. Queda claro que en la elección de medio término se plebiscita la gestión, pero también se ponen en cuestión los liderazgos opositores.
Los responsables de campaña de cada frente tendrán el complejo desafío de generar entusiasmo ciudadano respetando los protocolos covid, que impiden las movilizaciones y actos masivos. Más difícil aún en unas PASO legislativas en las que sólo un frente (el FIT) presentará dos listas para dirimir candidaturas. Esto transformará a las elecciones de septiembre en una especie de censo electoral previo a las de noviembre, en las que se definen finalmente los cargos en disputa. Elecciones con poco entusiasmo, pero con mucha relevancia, ya que serán una especie de termómetro del clima con el que arrancará la carrera hacia 2023.