Recientemente apareció un nuevo, interesante y particular jugador dentro del mapa de proyección minera en la provincia de San Juan. La empresa australiana Fortescue mantuvo reuniones con el Ministro de Minería de San Juan, e incluso, representantes de la multinacional ya visitaron los proyectos de cobre local: Pachón, Azules y Altar.
El interés de este gigante del hierro mundial por el cobre sanjuanino parece amoldarse a sus planes de expandir su explotación hacia otros minerales muy demandados por la economía China, su principal cliente. Las particularidades de este potencial interesado en los grandes yacimientos cupríferos locales no son menores y rompen el tradicional molde del sector. Entre ellos se destaca que proviene de uno de los países más exitosos en materia minera y es liderada por dos mujeres, uno de los factores más distintivos.
Es casi imposible encontrar dentro del sector minero otra compañía que tenga a dos mujeres como Elizabeth Gaines y Jane Shuttleworth como máximas responsables operativas. A su vez, la compañía demuestra una visión internacional abierta al contacto comunitario en general. Este hecho, sumado a la amistad que el exrugbier Agustín Pichot sostiene con Andrew Forrest (dueño de la compañía y fanático del deporte) es que el excapitán de Los Pumas fue designado recientemente como CEO de Fortescue Metals para toda la región de América Latina y en especial, Argentina.
Si bien el Gobierno de San Juan es cauto a la hora de explicar las intenciones de la compañía australiana, se nota el entusiasmo por el grado de interés que genera que una potencia minera pose sus ojos en el cobre sanjuanino en el marco de un mercado cuprífero con proyecciones de crecimiento.
Según fuentes oficiales de Fortescue, en tan sólo 15 años la multinacional se ha convertido en un líder global en la industria del mineral de hierro, “reconocido por sus cualidades extractivas”.
Ellos se definen bajo conceptos como “cultura única, innovación y desarrollo líder en la industria de infraestructura de clase mundial y activos mineros” específicamente en aquellos ubicados en la zona de Pilbara, en la parte occidental de Australia.
Desde que se fundó en el año 2003, Fortescue ha descubierto y desarrollado importantes depósitos de hierro y construido algunas de las minas más importantes del mundo. Su enfoque está abocado a “ser el productor de mineral de hierro más seguro, de menor costo y más rentable”.
Ahora se encuentra batiendo su récord de mercado, produciendo 170 millones de toneladas de mineral de hierro por año. Dichas cifras han respaldado su ubicación como uno de los cuatro mayores productores de metal del mundo.
A su vez, en 2016 la compañía obtuvo el certificado como proveedor chino con menor costo por vía marítima según el Metalytics Resource Sector Economics, evidenciando su fuerte y constante trabajo en materia de reducción de costos. Este último factor puede llegar a ser decisivo en relación al desarrollo del cobre sanjuanino, debido a la celeridad que existe en el gobierno local por dar continuidad a la gran minería que comenzó con Veladero, Gualcamayo y Casposo.
Para conocer un poco más la economía internacional de la minera australiana vale destacar que las relaciones con sus clientes en China han crecido desde el primer envío comercial de hierro en 2008. Actualmente suministra el 17 por ciento de todo el mineral de hierro de origen marino que llega al gigante asiático. Las expectativas y la cara del cliente parece ser las mejores ante el gran interés que representa la continuidad minera del cobre local y la apertura a nuevos mercados por parte de Fortescue. El tiempo y las reuniones venideras determinarán el ritmo del nuevo vínculo ya que Pachón, Los Azules y El Altar, actualmente se encuentran en manos de otras compañías mineras.
8.500 millones de dólares de inversión significaría para San Juan la entrada en actividad de Pachón, Los Azules y El Altar.
Un tanque australiano
La compañía minera Fortescue posee y maneja cinco atracaderos de hierro integrados en tres sitios diferentes en la región oceánica de Pilbara. A su vez, opera el ferrocarril de transporte pesado más rápido del mundo. Recientemente y con la intención de aumentar la cadena de suministro, la compañía incorporó ocho Fortescue Ore Carriers (vagones), diseñados para aumentar la eficiencia de envíos hacia el puerto que maneja en Australia. También se destaca por poseer proyectos en otros países sudamericanos como Ecuador y ser la primera compañía en el mundo que utiliza tecnología de transporte autónomo CAT a escala comercial, incorporando constantemente vanguardia tecnológica en el negocio minero.