El juez federal de Dolores, Alejo Ramos Padilla, expuso ayer ante la Comisión de Libertad de Expresión de la Cámara de Diputados sobre la causa donde está imputado el fiscal federal Carlos Stornelli por supuestas maniobras de extorsión y espionaje ilegal.
‘Los jueces tenemos la obligación de poner en poder a la ciudadanía este tipo de información‘, afirmó el magistrado ante los diputados que participaban de la reunión convocada por el kirchnerista Leopoldo Moreau, y a la que asistieron miembros de su bloque, del Movimiento Evita, de la izquierda, del Frente Renovador y de Argentina Federal.
En su exposición inicial, que duró dos horas y media, Ramos Padilla dijo que ‘quienes han sido objeto de esta investigación no tienen protección‘.
Al enfocarse en el contenido de los chats y comunicaciones obtenidas del falso abogado Marcelo D’Alessio, el juez reveló que ‘el caso que puede involucrar a un fiscal, no a uno solo, sino a varios, a un periodista, a un juez, es ínfimo‘.
Advirtió que ‘lo que estamos viendo puede perjudicar las relaciones con Estados Unidos, con Venezuela, con Israel y con Uruguay. Porque esta organización tuvo incidencia en distintos ámbitos de incumbencia de varios países‘
A continuación, aclaró: ‘Estamos hablando de una organización al menos paraestatal, con vinculaciones de todo tipo. Muchos periodistas pueden haber sido afectados en su buena fe y haber formado parte de una maniobra de espionaje ilegal de la que ellos no tenían conocimiento‘, aseguró.