Con el dólar blue coqueteando en las alturas y la latente amenaza de que arrastre en su escalada a los dólares financieros -MEP y Contado con Liquidación-, el Gobierno anunció la recompra de deuda externa por US$1.000 millones ‘para aprovechar los precios bajos de los bonos’, y de paso, calmar la tensión de los mercados. Sin embargo, aúno no se precisó de dónde saldrían los dólares para concretar la operación.
La resolución del Ministerio de Economía que autoriza esta operación indica que los títulos públicos ‘se encuentran cotizando en el mercado secundario a bajas paridades (en un 30%), lo cual constituye una oportunidad de compra’.
La medida fue anunciada en la red social de Twitter por el ministro de Economía Sergio Massa: ‘Vimos una caída de mil puntos o más del riesgo país en la Argentina y es una ventana. Por eso hemos tomado la decisión de llevar adelante un proceso de recompra de la deuda externa argentina por más de mil millones de dólares que empieza el día de hoy’, precisó Massa. Y agregó: ‘Hemos tomado la decisión en una resolución conjunta de la Secretaría de Finanzas y de Hacienda de encomendar para mayor transparencia al Banco Central que en nombre del Tesoro lleve adelante ese proceso de recompra para seguir bajando el riesgo país, que mejora las posibilidades de las empresas argentinas y del Estado argentino de acceder al mercado de capitales’.
El titular de la cartera económica precisó que se trata de ‘un primer paso de mil millones de dólares, muy enfocado en los (bonos) globales, sobre todo los de corto vencimiento, 29 y 30’ al argumentar que es ahí donde hay que ‘atacar para la mejor administración de la deuda, el perfil de deuda y el perfil de vencimientos de la Argentina’. El ‘objetivo principal’ del anuncio fue el bono GD30, por ser ‘el título más líquido y utilizado para obtener dólares’.
‘Seguramente, a lo largo de los próximos meses, estaremos invitando también al sector privado a acompañar al Estado argentino en este trabajo de mejora de perfil es que llevemos adelante otras medidas como la que hoy estamos tomando’, adelantó el funcionario. En ese sentido, Massa dijo ‘quiero invitarlos a todos a que trabajemos a que la mejora en el perfil de la deuda en la Argentina nos permita a todos devolver a la Argentina a un lugar de participación en el mercado de capitales’.
La reacción inicial del mercado fue positiva, ya que los bonos Globales a corto plazo subían hasta 12% en Nueva York, mientras el riesgo país que elabora la banca privada PJ Morgan y que evalúa el riesgo que implica para los inversores extranjeros prestarle plata a cada país, perdía más de 100 puntos hasta los 1.781 puntos.
El anuncio se da en medio de una sostenida suba del dólar blue, que el martes había alcanzado un récord nominal de $ 378, tras subir 8 pesos en un día, un dato que empezó a generar inquietud en el Ministerio de Economía. Pero que ayer al anunciarse la recompra de deuda bajó 1 peso a $377.
Pese al optimismo inicial de los mercados, esta estrategia genera dudas entre los analistas ya que se aplica en un contexto en que el Banco Central sufre de escasas reservas internacionales y el Tesoro tiene el mercado de deuda cerrado. Por eso, el Gobierno aplica fuertes restricciones de acceso al mercado de cambios y proliferan los dólares paralelos mientras la inflación corre al 94,8 % anual en 2022.
En medio de este complejo escenario, Massa dio a entender que los dólares para recomprar bonos provendrán de los menores niveles de importación de energía inicialmente previstos, pero Argentina sufre una sequía que reducirá drásticamente las exportaciones agropecuarias en 2023.
- Los objetivos principales de la medida
La recompra de deuda persigue varios objetivos que se pueden potenciar entre sí: aprovechar los precios relativamente bajos de los bonos, ayudar a la baja en el riesgo país y a levantar el mercado local de deuda, y a generar una intervención adicional en el mercado cambiario, a través de operaciones indirectas que generan la cotización de los dólares financieros. Así lo indicaron economistas y especialistas de mercado que, más allá de la recompra de deuda, observan en la nueva medida del Palacio de Hacienda una oportunidad para intervenir en el mercado cambiario y tener un mayor poder de fuego en el tipo de cambio para reducir la brecha cambiaria sin ir contra las recomendaciones del FMI.
‘La medida me parece positiva, ya que de esta forma están comprando deuda a un tercio de su valor’, expresó el economista Fausto Spotorno, a Télam, quien opinó que los eventuales fines de contener los dólares financieros ‘son muy de corto plazo’.
Según, Gabriel Caamaño, de Consultora Ledesma, el 2023 se trata de ‘año electoral y están tratando de armar un mecanismo que el FMI pueda aceptar que les genere la capacidad de intervenir en el precio de los bonos y contener las brechas cambiarias’, agregó el economista.
La lectura de Dario Epstein es que, de esta forma, ‘Massa aumenta el poder de fuego para intervenir el dólar MEP (Bolsa) y el dólar CCL (Contadocon liquidación), vía compra de bonos’, ya que ‘desde el BCRA estaban limitados por el FMI’, expresó.
- La ayuda de las tasas
El Banco Central incrementó en 200 puntos básicos las tasas de interés de muy corto plazo con los bancos. Subir las tasas ayuda también a contener los tipos de cambio paralelos, ya que se trata de una tasa de referencia que impacta a la suba la tasa de las cauciones.